Frente a frente: La marcha del 19 y lo que viene
Frente a frente: La marcha del 19 y lo que viene

Dos políticos y abogados opinan de los cambios que deberían hacerse por Fiestas Patrias y comentan lo que dejó la ‘Toma de Lima’.

Natale Amprimo

¿Cuál es el balance de la marcha del 19J?

Se levantan banderas abiertamente anticonstitucionales. Plantean nueva Constitución, cerrar el Congreso y reponer a Pedro Castillo. Muchos apoyaron a Vizcarra y a la plancha de Boluarte. La congresista Susel Paredes dijo que ‘si el presidente es ladrón o asesino, no es incapaz moralmente’. ¿Dónde estuvieron cuando Castillo, cual caballo de troya, puso a los prefectos violentistas? La Constitución no permite hacer un referéndum directo para reformar la Constitución. ¿Dónde estaban cuando Vizcarra hizo atropellos constitucionales? Sentados al lado de Vizcarra. Son oportunistas que buscan dividir y buscar el caos en el país.

¿Cuál es el límite entre la violencia y la protesta?

El derecho a expresarse no puede colisionar contra la seguridad pública ni privada. Tampoco puede atentar contra personas. Si revisas la Constitución, ese derecho debe ser coordinado. Si tomo un aeropuerto estoy atentando contra una instalación nacional de primer orden. Cuando Sendero Luminoso quemó actas para empezar la lucha terrorista, había gente que también marchaba. Entre estas personas hay una célula violentista que tiene un propósito distinto al de algunos ingenuos. Se trata de no ser un tonto útil.

¿Cuál debería ser el rol de las fuerzas del orden?

Ellos tienen la ley de su lado. Estamos en un estado de emergencia, no en el cielo. El Estado de derecho no es un régimen estúpido. Tiene mecanismos para actuar contra quienes buscan alterarlo. Si no, la policía no tendría pistolas y balas, sino un catecismo y una cruz. Si uno viola la ley, el otro busca reponerla. Eso se vio en la CVR. No se permite el exceso, obviamente. Pero si viene una turba que quiere tomar el Congreso, ¿la Policía va a esperar a que lo prendan para actuar? El Estado tiene el uso legítimo de la fuerza. Pero han triunfado los antivalores. Yo no soy de estigmatizar con la palabra ‘terrorismo’. Pero hay cosas que no se pueden aceptar. Y Francia no es un buen ejemplo el día de hoy.

Se habla de cambios para el 28 de julio. ¿Qué debería hacer el Gobierno?

Me preocupa que no haya políticas públicas. Estamos en un piloto automático que gasta combustible. Esa es la economía pasando la factura. No se trata de cambiar caras. ¿La presidenta va a tener firmeza para tomar decisiones? ¿Va a saber elegir personas? Decir cosas huecas no es hacer política No es Valentín Paniagua ni lo va a ser, aunque se lo digan al oído. ¿Dónde estuvo cuando ocurrió lo de Sarratea? Muda. Tuvo cargos paralelos, vulnerando la Constitución. En cuanto al premier, creo que es un hombre con buenas maneras, pero me ha sorprendido ingratamente que haya insistido caprichosamente en esa ley anticonstitucional del despacho remoto.

Tras las marchas y la llegada de la crisis económica y los cambios de 28 de julio en el gabinete y el Congreso, pareciera que se cierra una etapa de tregua.

Con Castillo estábamos en el sótano 14. Hemos pasado al 8, pero seguimos en el sótano. No olvidemos de dónde viene Dina Boluarte. Ella ha sido compañera de plancha de Castillo.

¿Cuáles son las políticas públicas que se deberían anunciar en Fiestas Patrias? ¿Seguridad ciudadana, reactivación económica, salud?

La seguridad ciudadana impacta fuerte en la ciudadanía. No tienen liderazgo ni fuerza para grandes cambios. Deben ser conscientes de sus limitaciones. Pueden encontrar aliados para el tema de seguridad ciudadana en los alcaldes. En el caso económico, cada día se dictan más normas que desnaturalizan el régimen económico constitucional que tenemos. El Congreso muestra un desprecio por la opinión pública. Han perdido la vergüenza porque son conscientes de que tienen un alto nivel de desaprobación.

Natale Amprimo, abogado constitucionalista. (Foto: Renzo Salazar / @photo.gec)
Natale Amprimo, abogado constitucionalista. (Foto: Renzo Salazar / @photo.gec)


Gino Costa


¿Cuál es el balance de la marcha del 19J?

Fue exitosa porque fue una marcha nacional. No se limitó a Lima. Fue pacífica y democrática, ha representado a un espectro amplio de fuerzas sociales. Estas demandas convergen en el adelanto de elecciones. Me parece positivo que el Ejecutivo y el Congreso sepan que hay un malestar en las calles. Espero que sea el punto de partida de una movilización sostenida, pacífica y ordenada que nos lleve a un adelanto de elecciones.

¿Cuál es el límite entre la violencia y la protesta?

La protesta tiene que ser pacífica. Y si no, ahí está la Policía para identificar a los revoltosos y detenerlos. Hay un sistema de inteligencia policial. Y tomar medidas preventivas. Pero no salir a meter bala. Por más violenta que sea la protesta, mira Francia. Una semana de protestas superviolentas pero ningún muerto. No es que solo haya violencia en el Perú.

¿Cuál debería ser el rol de las fuerzas del orden?

La Policía ha actuado mal, está algo desbordada. Mira de nuevo Francia. La Policía solo puede recurrir al arma de fuego cuando la propia seguridad de los efectivos está en peligro. Y ya viste las evidencias presentadas por las organizaciones de derechos humanos, muchos han muerto horas después de los intentos de tomas de aeropuertos y a largas distancias. Debieron aprovechar la circunstancia del golpe fallido. Terminan perdiendo la victoria por un mal manejo de la protesta. No se puede matar. No nos podemos sentir satisfechos de que haya habido una protesta y nadie haya muerto. No tiene que morir nadie nunca.

Se habla de cambios para el 28 de julio. ¿Qué debería hacer el Gobierno?

No veo ningún cambio. Se ha observado la Ley de Colaboración Eficaz. No veo qué más puede hacer a futuro este Congreso. No lo veo removiendo a Otárola ni a los jefes militares y policiales en las plazas donde ocurrieron las más graves violaciones de derechos humanos. Y no veo al Ejecutivo predispuesto a ponerle un paralé al Congreso frente a su deseo de intervenir la JNJ o sacar al presidente del JNE. El Ejecutivo podría ser un contrapeso, como lo fue con Sagasti, Vizcarra y PPK.

Tras las marchas y la llegada de la crisis económica y los cambios de 28 de julio en el gabinete y el Congreso, pareciera que se cierra una etapa de tregua.

La inversión está paralizada y la pobreza está subiendo. Yo entiendo al sector empresarial que se siente aliviado con la salida de Castillo. Ciertamente, hay una diferencia notable entre la anterior situación y la actual. Pero no son cambios suficientes para generar inversión. El ministro de Economía es un funcionario con cierta trayectoria, pero no es una figura que inspire la confianza necesaria para animar al sector productivo. Ahora, tampoco creo que el sector empresarial se pase a la oposición. El empresario finalmente dice ‘nos salvamos de Castillo, para qué vas a ir a unas elecciones ahora cuyos resultados no sabemos’. Es un escenario peligroso. Pero creo que el peligro de no ir a elecciones es aún mayor, porque corremos el riesgo de perder la democracia.

¿Cuáles son las políticas públicas que se deberían anunciar en el mensaje de Fiestas Patrias? ¿Seguridad ciudadana, reactivación económica, salud?

No me hago ninguna ilusión. Tú me dirás que quizás Dina Boluarte podría construir un nuevo gabinete más amplio, pero no la veo deshaciéndose de Otárola. En economía hay que generar las condiciones de confianza para que se reactive la inversión privada. Con una economía parada los índices de pobreza y empleo no van a mejorar. En interior, creo que la policía está muy desgastada. Hay que fortalecer los aparatos de inteligencia y las instituciones de investigación criminal. Sí se sabe qué hay que hacer, pero no veo que el Ejecutivo tenga el liderazgo.

Gino Costa. (Foto: Agencia Andina)
Gino Costa. (Foto: Agencia Andina)