“Con las evidencias de las brechas de aprendizaje generadas, las nuevas autoridades deben tener claridad en los planes de educación a ejecutar en los próximos años”. FOTO JUAN PONCE EL COMERCIO
“Con las evidencias de las brechas de aprendizaje generadas, las nuevas autoridades deben tener claridad en los planes de educación a ejecutar en los próximos años”. FOTO JUAN PONCE EL COMERCIO

Acabamos de vivir un proceso electoral, para definir a las nuevas autoridades distritales y regionales. Si bien tenemos pendiente una segunda vuelta en 8 regiones, es importante definir prioridades y la agenda en el sector educación. Recordemos que según la ley de gobiernos regionales, la provisión del servicio educativo es competencia regional.

Luego de una pandemia y un prolongado cierre de aulas, con las evidencias de las brechas de aprendizaje generadas, las nuevas autoridades deben tener claridad en los planes de educación a ejecutar en los próximos años.

El Índice de Competitividad Regional 2022 en el rubro de Educación, promovido por el Instituto Peruano de Economía, establece 7 indicadores: analfabetismo, asistencia escolar básica, población con secundaria a más, rendimiento escolar en primaria, rendimiento escolar en secundaria, colegios con los tres servicios básicos y colegios con acceso a Internet.

El foco de atención en educación de las nuevas autoridades debería estar en: inversión en infraestructura escolar, con expedientes técnicos que cumplan las demandas del sistema de inversión pública y con una planificación que mida adecuadamente los tiempos de ejecución. Otra de las prioridades debe ser la mejora del rendimiento escolar, con la puesta en marcha de mejoras del Programa de Educación Logros de Aprendizaje que establece el Minedu, con énfasis en la puesta en marcha de los planes de recuperación de aprendizajes; promover la asistencia a clases y mejora de la conectividad de cada escuela. Esperemos que las nuevas autoridades tengan a la educación como una prioridad.

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