“La meritocracia es clave en el desarrollo de la carrera pública. Permite establecer estándares claros y objetivos”. (Foto: gob.pe)
“La meritocracia es clave en el desarrollo de la carrera pública. Permite establecer estándares claros y objetivos”. (Foto: gob.pe)

La aprobación apresurada por el Congreso sobre el proyecto de ley que propone el nombramiento automático de docentes ha sido cuestionada por diversos especialistas. Quisiera centrarme en tres elementos que demuestran el grave daño que una norma de este tipo puede hacerle al sistema educativo peruano.

La meritocracia es clave en el desarrollo de la carrera pública. Permite establecer estándares claros y objetivos que apunten a garantizar que un docente a cargo del aula cumpla con las competencias técnicas requeridas para el desarrollo de sus funciones. Considerar solo los años de servicio no garantiza que un docente cuente con las competencias necesarias para estar en un aula.

Desde hace más de 15 años una política de estado es la Carrera Pública Magisterial que con base en capacitaciones y evaluaciones define los ascensos de los maestros más preparados, garantizando de esta manera el derecho a una educación de calidad. Para ello es necesario que el Ministerio de Educación implemente planes muy bien estructurados para desarrollar a nuestros docentes y así cada maestro tenga una ruta de crecimiento profesional.

Finalmente, no podemos hablar de un sistema educativo eficiente, que priorice demandas políticas frente a necesidades reales de las niñas, niños y jóvenes. Necesitamos a los mejores docentes en aula y ello, debe partir por un sistema meritocrático que los incentive y motive a seguir creciendo. Necesitamos revalorar la carrera docente y con leyes como esta, solo desmotivamos a los maestros que se han capacitado y esmerado por mejorar su nivel profesional. Espero que el Congreso se rectifique.

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