gabinete de la reconciliación
gabinete de la reconciliación

Tras dos semanas, PPK presentó un nuevo gabinete, ocho ministros nuevos y un cambio de cartera (Aljovín).

En el llamado “gabinete de la reconciliación y diálogo” no participa el fujimorismo (este tiene que transitar su propia reconciliación); los sectores en pugna no están representados. Será difícil la reconciliación, el problema será la gobernabilidad. Hay varios vinculados al Apra, muchos decían “gabinete de la reconciliación con el Apra”. Tras aceptar el cargo ministerial, Barreda y Salinas fueron expulsados del partido (¿lo que le abre otro frente al Gobierno?). Mercedes Aráoz, Ferreyros, Arista, Vexler y Barreda trabajaron en el gobierno de Alan (2006-2011).

No hay muchas figuras con experiencia política entre los nuevos ministros; los voceados, Ántero, Eguren, Forsyth y Tudela quedaron en el rumor. Complicada convocatoria, he ahí la demora en la juramentación. Tras el indulto y la vacancia frustrada, la credibilidad se afectó. PPK debe aún aclarar sus víncu-los con Odebrecht. No pocos pedían un cambio de premier, pues negó el indulto cuando debió decir que esos temas eran potestad del presidente, lo que la dejó descolocada ante las fuerzas políticas, opinión pública y Congreso.

Entre tanto, Frente Amplio presenta, sin eco, una moción de vacancia por indulto. Arana trata de ganar espacio, “en río revuelto, ganancia de pescadores”, huérfano de apoyo y divididos con Nuevo Perú aunque el antifujimorismo e indulto los une. El fujimorismo solo apoyaría una vacancia por temas de corrupción.

El discurso del indulto y vacancia agotan, y la población va a exigir resultados en sus bolsillos. El país necesita inversión y los ministros deben caminar hacia la reconstrucción del norte. Está claro, este es el gabinete de Meche. Suerte.