Fiscal de la Nación abrió investigación al presidente Pedro Castillo, pero suspendió diligencias

La titular del Ministerio Público sustenta su decisión, de acuerdo a la disposición fiscal a la que accedió Perú21, en un precedente: la investigación que abrió en 2020 al entonces presidente Martín Vizcarra por el caso Richard Swing. Aquella vez la fiscal suspendió las diligencias hasta que Vizcarra, quien fue vacado por el Congreso ese mismo año, dejara el cargo.

Ávalos le imputa al presidente los delitos de “colusión y tráfico de influencias” (casos Petroperú y Puente Tarata) y “tráfico de influencias o patricinio ilegal” (caso FF.AA.), según la documentación a la que este diario tuvo acceso.

De acuerdo a la documentación, el primer hecho que se le están atribuyendo al presidente Castillo es “haber intervenido, indebida e indirectamente en el ‘proceso por competencia N°COM-012-2021-GDCH/PETROPERÚ para la adquisición de biodísel B100 en el mercado local para el período enero-abril 2022', con la finalidad de que la empresa Heaven Petroleum Operators, dirigida por Samir Abudayeh, gane dicha licitación por la suma de US$ 74 millones”.

El otro hecho atribuido por la Fiscalía al mandatario es “una amistad y cercanía” con la lobista Karelim López. “Como evidencian los hechos de las visitas nocturnas que realizó a la casa ubicada en el jirón Sarratea - Breña, en donde aquel también habría concurrido en reiteradas oportunidades en horas de la noche, para reunirse con distintas personas”, dice el documento.

La disposición fiscal también destaca que López “se habría encargado de la organización de la fiesta infantil de cumpleaños de la menor hija del presidente de la República, realizada el 27 de octubre de 2021. Dicho evento habría animado por Brenda Carvalho, a quien precisamente, Karelim López la habría contactado directamente para dicho fin”.

Para el Ministerio Público, “este beneficio constituiría la presunta contraprestación que habría obtenido el presidente por los hechos que se la atribuyen” y “los hechos antes descritos pueden subsumirse preliminarmente en el tipo penal de Tráfico de Influencias agravad y colusión, atribuyéndose dichos delitos a Pedro Castillo, en condición de autor y partícipe, respectivamente”.

Esta indagación fiscal se da en medio de otras como la iniciada a fines de diciembre por la fiscal anticorrupción Norah Córdova, quien abrió una investigación preliminar por ocho meses contra Karelim López, el gerente general de PetroPerú Hugo Chávez Arévalo y el empresario Samir Abudayeh por presunto favorecimiento a la compañía Heaven Petroleum, días después de registrarse reuniones en Palacio de Gobierno con el mandatario Pedro Castillo.

Según un reportaje de Panorama, 18 de octubre el presidente Pedro Castillo tuvo una inusual reunión con el empresario comercializador de biodiesel y contratista de Petroperú (PP) que, luego de 18 días de la cita, ganó, sin competencia, un contrato por casi 300 millones de soles con la empresa estatal. También estuvieron, a la misma hora, Chávez y López.

Otra de las investigaciones es la iniciada el 1 de diciembre por la Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios contra Karelim López y el exsecretario presidencial Bruno Pacheco por el presunto delito contra la administración pública en la modalidad de tráfico de influencias. Esto luego de que el Consorcio Puente Tarata III, integrado por una empresa asesorada por López, obtuvo la adjudicación de un contrato por S/232,5 millones de Provías Descentralizado días después de visitas de la lobista a Palacio de Gobierno.

Precisamente, el nombre de Karelim López apareció en escena luego de una reportaje de Cuarto Poder que puso en evidencia al presidente Castillo manteniendo reuniones sin registro en Breña. Una de las visitantes era la lobista.