[Opinión] Sandra Belaunde: “Te quiero verde”

Cuando la responsabilidad es de todos, se dice que es de nadie, pero en realidad sigue siendo de todos. Que no se muera el planeta, y nosotros con él, es responsabilidad de todos. Es nuestra responsabilidad frente a nuestros hijos, a niños que recién empiezan a vivir o todavía no han llegado. El planeta debe ser prioridad de todos, personas, familias, microempresas, grandes industrias y gobiernos.

Todas las responsabilidades que tenemos en el día a día sumadas al ruido político con que despertamos y nos vamos a acostar, no nos dejan escuchar otros problemas que son, incluso, más importantes. Nuestro Perú es el tercer país más vulnerable al cambio climático. Imaginen que en el planeta había diez glaciares, siete de ellos estaban en nuestro país. En treinta años, que son menos de los que tengo yo, se ha derretido uno y medio. A este paso, me pregunto si habrá glaciares cuando mi hijo de tres años tenga mi edad.

Si el cambio climático suena lejano a nosotros, pensemos en nuestros hijos y nietos. ¿Qué vamos a hacer para que ellos tengan agua para vivir? Con tanta polarización que hay actualmente en el país, este es un tema que nos puede unir. Todos podemos hacer algo. Por ejemplo, en el sector financiero se está trabajando para que la sostenibilidad ambiental sea un criterio de riesgo al momento de evaluar proyectos. De esta manera, se promueve y se impulsa aquellos proyectos grandes y chicos que respeten y cuiden el medio ambiente. Esto no es poco, puede ser un motor de desarrollo muy importante por el alcance del sistema. Si cada sector, si cada uno de nosotros piensa en cómo sanar a nuestro planeta, nuestras probabilidades de desacelerar el cambio climático son más altas. Si nos concentramos solo en el ruido –en palabras de Joaquín Sabina–, no se escuchará el final.