La extrema violencia contra la mujer ha cobrado la vida, en lo que va de este año, de 32 peruanas, cuyas familias hoy —y todos los días— lloran por ellas y suplican a las autoridades —Ministerio de la Mujer (Mimp), Policía Nacional, Fiscalía y Poder Judicial (PJ)— justicia y condenas ejemplares para los agresores.