Arte peruano de la mano de la pintora Sandra Gamarra brilla en Berlín

“La grieta comienza dentro (The Crack Begins Within)”, nombre de esta edición de la bienal, abrió sus puertas el 5 de setiembre pasado, luego de un inevitable retraso debido a la pandemia del COVID-19. Para el evento, que se realiza presencialmente, Sandra propuso cuatro pinturas de la serie “Cryptomnesia” y cuatro vitrinas de “La Sala del Ostracismo”.

La Sala del Ostracismo representa cerámicas antropomorfas de origen prehispánico tomadas de varios museos en España, procedentes de donaciones y saqueos coloniales. Detrás de ellas, se observan escritas palabras utilizadas para designar peyorativamente a los pueblos indígenas de Sudamérica.

En Cryptomnesia, las pinturas representan a salas de museos historiográficos en las que se observan objetos no occidentales, como embarcaciones polinésicas o momias, acompañadas con fotografías de prensa que representan a los herederos de estas culturas. Por ejemplo, se compara a las navegaciones polinésicas con los trágicos viajes de los inmigrantes africanos para llegar a Europa.

¿Qué expresan estas obras? “Todo siempre se ha medido bajo una cosmovisión occidental. A las culturas nativas sudamericanas se les va otorgando, para bien o para mal, lógicas cronológicas. El pensamiento occidental tiene una línea de tiempo que implica un permanente desarrollo y desde ese punto de vista, todo lo antiguo es salvaje, es bárbaro, está en vías de desarrollo”, explica Gamarra.

“Mi trabajo busca darles una vuelta a estos moldes. Con esto no intento decir que la cultura occidental no es válida, sino que le pongo el mismo valor que a las demás”, agrega.

Sandra Gamarra estudió en la Facultad de Arte de la Pontificia Universidad Católica de Perú, doctorándose en la Facultad de Bellas Artes de Cuenca, de la Universidad de Castilla-La Mancha (España) en 2003.

Ha expuesto su trabajo en Brasil, España, Portugal, Colombia, Estados Unidos, entre otros. En 2002 creó el LiMac - Museo de Arte Contemporáneo de Lima, un museo itinerante que busca que los visitantes tengan una visión general de los proyectos artísticos que influyen y afectan a la ciudad.

La invitación para la bienal se hizo formal a finales de 2018, cuando Sandra residía en Madrid. Ella considera que su inclusión en el evento es un reconocimiento a su trabajo.

“Son las curadurías (de la bienal) las que escogen las obras, principalmente porque encajan dentro de la narrativa, del discurso, como en mi caso”, comenta la artista.

La pintora confiesa que en algún momento pensó que sus pinturas no llegarían a tiempo al evento debido a las restricciones por el COVID-19. Sin embargo, contó con la ayuda de la agregaduría cultural de la Embajada del Perú en Alemania para cumplir con los plazos.

Pese a la importancia de esta participación, Sandra, quien se encuentra ahora en Perú, lamenta no poder asistir presencialmente al evento. Los diálogos y discusiones que surgen alrededor del arte en las mismas salas de exposición tendrán que esperar para una próxima ocasión.

La bienal exhibe también la obra de la peruana Elena Tejada-Herrera titulada “Ellas Cantan, Ellas Bailan, Ellas Pelean”.

Consiste en varios videoclips de corta duración, en los que se narran “las disyuntivas de la mujer y sus luchas, con una visión estética post-internet”.

La bienal de arte es el primer evento cultural internacional que se realiza de forma presencial en Berlín durante la pandemia. Más información en: 11.berlinbiennale.de