PUBLICIDAD
Tania Libertad recuerda a Armando Manzanero, el enamorado eterno [CRÓNICA]
Tania Libertad nos acompaña a recordar al compositor y cantante mexicano que falleció ayer víctima del coronavirus. La amiga y compañera entrañable de giras lo describe como un hombre elegante, y enamoradizo.
Imagen
Fecha Actualización
Eran las 8 de la mañana. El teléfono de Tania Libertad sonó, ella no sintió el escalofrío que a veces antecede a las malas noticias porque un día antes le habían confirmado que su gran amigo se recuperaba del coronavirus. El frío se colaría en sus huesos en cuestión de segundos, las lágrimas incontenibles, lo que te niegas a creer: Armando Manzanero, a los 85 años, había muerto.
Nacido en Yucatán el 7 de diciembre de 1935, tenía una trayectoria de 70 años, más de 30 trabajos discográficos y más de 400 canciones. Tania Libertad, su amiga peruana-mexicana, compañera de giras y vecina de calle –cuadra y media los separaban–, cuenta que ambos planeaban un concierto tipo bohemia por streaming para dar gusto a los fans confinados por la pandemia. Quedó pendiente, como a veces ocurre con el amor, el desamor, el encuentro de los enamorados bajo la lluvia, los planes que se dibujan en el cielo.
Tania Libertad, acaso la pareja artística más persistente de Manzanero, me dice, desde Ciudad de México, que ambos se conocieron en Lima. Ella quizás tendría 17 años, y cantaba unos cuantos temas para abrir el espectáculo del maestro. Uno de esos encuentros fue en lo que era el cine Pacífico, en Miraflores.
Pronto se volverían a encontrar en México. Hay amistades hasta el final, y así fue la dupla Armando y Tania: “Era un hombre divertido, creativo, que adoraba la comida, generoso, amaba viajar y engreír a sus amigos. Era el mejor contador de chistes que he conocido”.
El maestro se ponía su bufanda, su gorrito, y así en pijama iba a la casa de la intérprete. “Ahora empieza la leyenda. Ha sido el más contemporáneo del mundo, no solo de México”, puntualiza Tania y confiesa que la canción “Por debajo de la mesa” era una de sus preferidas.
Armando y Tania se llevaban fantásticamente bien. En las giras, que incluyeron Europa y diversos países del mundo, se la pasaban disfrutando. Cuando cantaban juntos, la complicidad era evidente. Se da entre los amigos de verdad.
“Con él compartí muchas jornadas y escenarios. Fue más que una pareja artística, fue una familia. Se siente mucho dolor”, murmura Tania. La voz se le parte.
“Era un enamorado constante. Se enamoraba todos los días. A su viuda (Laura Elena Villa) le hizo las canciones más bellas. ‘Por debajo de la mesa’, al igual que ‘Dormir contigo’”. Se casó cinco veces, tuvo siete hijos y 16 nietos.
Tania lo describe como un hombre elegante hasta para mandar al diablo a alguien. Por el coronavirus, la intérprete no sale de casa, se cuida al máximo. Armando optó por seguir viviendo: “No sé cómo se contagió, pero no se estaba quieto. Estuvo en la inauguración de su museo, viajaba… Como si no pasara nada”. Su hijo cree que fue en su cumpleaños, el 7 de diciembre. Nadie sabe con certeza.
En el estudio de Tania Libertad está el piano que Armando Manzanero le regaló: “Su presencia es y será imborrable”.
La última vez que se vieron fue hace tres meses. En la mesa, los tamales peruanos que Tania había preparado. Armando amaba la comida. Era de llevar a los amigos a los mejores restaurantes o al más humilde, siempre que la sazón fuera extraordinaria.
Empezó a trabajar a los 12 años, y la guitarra la tocaba desde los 8. Su mamá cambió una máquina de coser por un viejo piano, y allí nació el músico. “Contigo aprendí” lo hizo inmenso, y a él le fascinaba cantarla siempre.
GRATITUD EN VIDA
Manzanero recibió innumerables homenajes en vida, de cantantes de diversas generaciones, algo que lo hacía profundamente feliz. No solo fue Luis Miguel. Julieta Venegas cantó “Esta tarde vi llover” con el compositor. En los Premios Billboard 2020, el yucateco cantó con Luis Fonsi, Pablo Alborán y Joy. “Soy un hombre de otra época que ama vivir en esta época”, comentaba.
Fue amigo de Chabuca Granda, cantó “Bello durmiente” de la peruana y era admirado por Juan Diego Flórez. Su canción “Contigo aprendí” inspiró a la selección peruana en 2018. Adoraba el Perú, peleaba con la diabetes, y quería ser recordado “como un loco precioso, como un ciudadano yucateco, que lo mejor que ha tenido en la vida es ser mexicano”.
VIDEO RECOMENDADO:
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD