“Siendo el único interno del centro penitenciario Barbadillo es muy difícil que pueda contagiarse de tal virus; en las condiciones carcelarias expuestas. Cuenta con espacio suficiente para realizar actividades físicas e intelectuales acordes a su calidad de sentenciado. Por lo tanto no se advierte de motivos ciertos que, apunten a probables inminencia de ser contagiado por el COVID-19”, se lee en la resolución.