Como un reloj de arena, los días van marcando la llegada del 15-O, fecha establecida por el régimen para celebrar elecciones a gobernadores de estado; luego de alzarse con un nuevo estado totalitario comunista avalado con la fraudulenta Constituyente Plenipotenciaria elegida por las comunas, con el aval del Consejo Nacional Electoral dirigido por los cómplices del secuestro de Venezuela.
Y usted se preguntará: ¿ahora los venezolanos van a votar por gobernadores de estado, luego de cuatro meses en la calle pidiendo la salida del régimen, bajo el ataque implacable de las fuerzas armadas con heridos, presos violados y torturados, muertos que ya no se nombran, hogares desolados, por los que huyen de la hambruna y de un país donde la vida no vale nada? Y usted se preguntará: ¿y qué pasó con el plebiscito del 16-A, donde ese pueblo manifestó su decisión de salir del régimen? Y se volverá a preguntar: ¿esa constituyente fraudulenta le permitiría sacar a cualquier gobernador electo de la oposición de un ‘plumazo’? ¿Acatando la asistencia a esas elecciones se legitima el estado totalitario?
Estas preguntas tienen respuestas que convalidan la abstención de unos y los que defienden ir a votar.
Mientras tanto, el reloj sigue su ritmo hacia esa fecha, ante la mirada de los venezolanos atrapados en una inmensa telaraña que ha sido tejida con precisión por los hacedores del más espectacular secuestro que se haya hecho a una nación con el apoyo del voto democrático.