/getHTML/media/1229195
Cherman: "Quien me quiebra el lado patriótico fue Juan Acevedo con Paco Yunque"
/getHTML/media/1229190
Marco Poma CEO de Tkambio: "Perú está atrasado en materia de 'open banking'"
/getHTML/media/1229170
Percy Medina por nueva Mesa Directiva: "Tenemos que estar vigilantes"
/getHTML/media/1229169
Carlos Basombrío: "La lista que salga será más de lo mismo"
/getHTML/media/1228869
Iván Arenas: "Hay riesgos si APP asume Mesa Directiva"
PUBLICIDAD

Memento mori

Imagen
Martín Vizcarra también afirmó que el acuerdo con Odebrecht permitirá conocer quiénes recibieron las coimas para hacer proyectos sobrevalorados. (Foto: GEC)
Fecha Actualización
Es muy fácil olvidar que el poder es efímero, como los aduladores. Se dice que en la antigua Roma, al desfilar los generales victoriosos, alguien detrás les recordaba “mira detrás de ti, recuerda que morirás”. Un recordatorio de su condición de mortal y por tanto, no era más que el resto.
Después de haber estado con niveles record de aprobación, la ligera rebaja en las encuestas que sorprende al presidente Vizcarra podría servir, igualmente, como recordatorio de esta vulnerabilidad y, ojalá, llevarlo a reflexionar sobre la necesidad de sembrar para el largo plazo y superar la tentación de tomar aquellas medidas que cuenten con aprobación inmediata. Supongo que es difícil para un presidente que siente que su legitimidad depende de esas ovaciones y que tiene miedo a arriesgar, adoptando cualquier medida que pueda resultar contraproducente para su popularidad.
Pero las encuestas solo nos muestran lo inmediato y terminan sometiéndonos a los vaivenes de la opinión pública que un día aplaude lo que al día siguiente puede condenar. Y, tal vez a raíz de las lluvias en el sur, se haya hecho evidente que, dos años después de El Niño costero, la reconstrucción del norte solo tiene un avance de 5%. Y no importa que se diga que cifras mucho más altas han sido transferidas a regiones, provincias y municipios; en algún momento, el Gobierno debe entender que puede compartir los logros, pero los errores serán siempre atribuibles a él. Así funciona nuestra descentralización.
En su afán de rescatar la forma de lo provinciano, el presidente y el premier olvidaron el fondo de la necesidad. Dieron dinero en lugar de hacerse cargo. Ojalá la lección haya sido aprendida: el liderazgo implica tomar decisiones no siempre populares.
TAGS RELACIONADOS