Mi amigo ‘El once’

Carlos Carlín,Habla.BabasAyer te busqué porque te extrañaba. Hacía mucho que no sabía nada de ti. Ni siquiera recordaba la última vez que nos vimos. Tenía ganas de verte y, sobre todo, de verte bien. Prendiéndote, ahí estabas. En el mismo lugar donde hace años te dejé. Estabas igualito. No habías cambiado nada, no habías mejorado en nada. Igualito que siempre. Lánguido, gris, con mala imagen y entrañablemente aburrido. ¿Te acuerdas de cuando regresaste el año 80 luego de que te secuestrara la dictadura? Siempre has sobrevivido a todo con floro, astucia y pendejada. ¿Recuerdas el accionariado difundido? Jajaja, ¡qué bien la pasamos! ¡Cómo nos burlábamos de la gente! Inventamos "La tienda del aire" para vender ¡planchas y wafleras! Qué buenos tiempos pasamos juntos, ¿no? ¿Te acuerdas de cuando con Wilder Orbegoso, Fernando Moreno y María Vallejo jugamos a recibir llamadas por teléfono? "¡Habla el Pueblo!", decíamos jugando a ser importantes. Ay, mi canal… ¡qué has hecho con tu vida! Ayer te encontré. Era de noche y te estabas alquilando a un grupo religioso. No te habías movido del mismo lugar. Solo había que llegar al "11" para comprobar que en todos estos años no habías hecho nada bueno. –Estoy bien, mi hermano, solo hay que poner el hombro– me dijiste. Inmediatamente después, como cuando mirábamos Canal 11, te quedaste dormido. Y Canal 11, ay, siguió muriendo.