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El riesgo colombiano

“Es imperativo que las fuerzas democráticas latinoamericanas, las que aún quedan, unan fuerzas para estudiar y entender la magnitud de los riesgos que enfrentamos”.

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Timochenko
Fecha Actualización
Las “nuevas” FARC (que no son sino las FARC de siempre, pero ahora con el cintillo democrático ganado en Cuba) pretenden postular a Rodrigo Londoño (‘Timochenko’) en las próximas elecciones presidenciales colombianas. Junto al líder narcoterrorista se presentarán a las cámaras legislativas (Senado y Representantes) sus compañeros de trinchera: Márquez, Catatumbo y compañía. En resumen, que los que hasta hace unos meses mataban, secuestraban y comerciaban cocaína bajo la sangre del pueblo colombiano podrían llegar al poder, esta vez gracias a quienes supuestamente defendían el sistema democrático.
Lo de Colombia no es juego y será la gran apuesta castrista de los próximos 7 meses. Habiendo reconstruido el poder en Venezuela, el eje castrista apunta a recuperarlo en Brasil y Ecuador. Lo de Colombia sería la cereza en la torta: fortalecería enormemente al eje en el área andina y aseguraría la provisión de recursos para el decrépito régimen cubano.
Por lo pronto, queda por verse si ‘Timochenko’ podrá inscribirse para las elecciones generales (temas legales, que aún se encuentran en revisión, podrían negarle la oportunidad), pero que las FARC presentarán candidato es casi seguro. En el plan mínimo ganarán ciertas regiones, en el intermedio obtendrán un poder considerable que les permita negociar con otros grupos de izquierda, y en el máximo se harán de la Presidencia colombiana. Nada mal para quienes, en otras circunstancias, veían el fin de sus días ante una corte o un fusil.
Es imperativo que las fuerzas democráticas latinoamericanas, las que aún quedan, unan fuerzas para estudiar y entender la magnitud de los riesgos que enfrentamos. Desde la firma del “acuerdo”, las FARC han probado una y otra vez que no están dispuestas a jugar limpio (mientras incumplen las partes más importantes del acuerdo, como entregar armas, dinero y rehenes, exigen que el gobierno cumpla todo aquello que les convenía).
Para el Perú, una victoria de las FARC sería catastrófica; Colombia, recordemos, es uno de nuestros principales aliados en la región, además de un importante socio comercial.
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