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¡A trabajar!

“La lista de ofrecimientos es larga y la capacidad del Estado de actuar, limitada (como bien sabemos). Ojalá este gabinete pueda calzar ambas realidades”.

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Mercedes Aráoz (Renzo Salazar)
Fecha Actualización
Interesante y articulado el mensaje de la premier Aráoz ante el Congreso. Desde unas elegantes disculpas, a fin de evitar mayores problemas con sus colegas parlamentarios, hasta un interesante relato de acciones y objetivos, algunos en clave futbolística.
Dicho esto, es claro que el gobierno pretende relanzar una política de corte popular, más cercana a las necesidades de los ciudadanos, partiendo por exigir a su equipo “pisar más la cancha”. Es, claro está, imprescindible que la ciudadanía sienta al gobierno trabajando en el campo, lejos de las oficinas y los aires acondicionados, sintiendo en carne propia lo que viven millones de peruanos día a día. Ahora, una cosa es exigirlo y otra conseguirlo.
Luego están las políticas trazadas por la PCM. Los principales frentes son la recuperación económica, la lucha contra la corrupción y la inseguridad, y cerrar ciertas brechas ofrecidas durante la campaña (agua y educación en particular). Sobre lo primero, los vientos de cola de los precios internacionales deberían servir para animar “los espíritus animales” en los próximos meses. Pero, ya sabemos, eso no será suficiente. El gobierno tiene ahí que hilar fino en dos áreas: la primera es asegurar la capacidad de gobernar, lo que significa llegar a algún tipo de acuerdo con el Legislativo (o, al menos, la parte del mismo con la cual mantendrían un acuerdo en lo programático); la segunda es la capacidad de sacar adelante distintos proyectos paralizados, unos por intereses políticos y económicos (los mineros, por ejemplo), y otros por la excesiva burocracia y tramitología.
Luego están los sostenes sociales. La gran apuesta del presidente Kuczynski fue el acceso a agua y desagüe; hoy, sin embargo, pareciera que han empaquetado bajo el eslogan de la “revolución social” distintas metas que van desde el agua y la educación hasta los programas del Midis y el acceso a la salud.
La lista de ofrecimientos es larga y la capacidad del Estado de actuar, limitada (como bien sabemos). Ojalá este gabinete pueda calzar ambas realidades.
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