PUBLICIDAD
Inexcusable
Imagen
Fecha Actualización
Indignante. Grotesco. Difícil encontrar adjetivos para describir las palabras del canciller Héctor Béjar sobre la Marina de Guerra del Perú. El exguerrillero velasquista la acusó de haber iniciado el terrorismo en nuestro país, como quien lanza al aire una verdad incontrovertible y conocida, sin siquiera detenerse a reflexionar sobre lo dicho.
¿Este es el ministro de Relaciones Exteriores que, según el gobierno de Pedro Castillo, merece el Perú? ¿Un individuo que luego de haber pasado años en prisión por intentar organizar, hace más de medio siglo, una insurrección contra la democracia peruana sin siquiera haber aprendido algo?
Los cuestionamientos a los integrantes del gabinete ministerial de Guido Bellido son muchos y van en aumento, pero lo dicho por Béjar exige una respuesta inmediata, como la que ya han manifestado en la propia Marina de Guerra y algunas bancadas del Congreso que no han tardado en reaccionar.
El canciller Héctor Béjar no puede permanecer un minuto más en su puesto. Su presencia en el gobierno constituye un ominoso ultraje a la democracia y a la historia del Perú, y a las instituciones y poderes del Estado que la sostienen, que por supuesto incluyen a las Fuerzas Armadas.
Eso, para no hablar de los más de 70 mil muertos que dejó la cruenta y dolorosa guerra que desató la furia terrorista de Sendero Luminoso en nuestra patria, según documenta la Comisión de la Verdad y la Reconciliación. Una absoluta falta de respeto a las víctimas y a sus familias, así como a quienes por esos años arriesgaron y dieron la vida en defensa del Estado de derecho en el país.
Las inexcusables declaraciones de Béjar revelan, además, el nulo o escaso respeto del partido de gobierno por la democracia que ahora dice representar, con Pedro Castillo a la cabeza. La permanencia de ese señor en Torre Tagle es una afrenta a todos los peruanos que no debe extenderse un minuto más.
PUBLICIDAD
ULTIMAS NOTICIAS
Imagen
Imagen
Imagen
PUBLICIDAD