Foto: César Fajardo.
Foto: César Fajardo.

Redacción PERÚ21

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Exdiputado y excandidato a la alcaldía de Lima por el Apra, Alfredo Barnechea vuelve a la política activa, ahora por las filas de AP y presentando su candidatura como "una alternativa diferente".

¿Qué lo ha motivado a entrar a la política activa después de 25 años? ¿Por qué quiere ser presidente?Porque llegué a la conclusión de que el Perú requiere un cambio radical muy profundo. Somos un país con picos de crecimiento económico, pero nos hemos convertido en una fábrica de desigualdades. Esto ha ocurrido en los últimos 25 años porque el modelo y los políticos no funcionan. Recorriendo el país, en cada pueblo hay una obra de Fernando Belaunde. Me he dado cuenta de que debemos volver a la política desarrollista de Belaunde. Una elección es la oportunidad para que los candidatos digan adónde quieren llevar el país.

Usted se presenta como una alternativa diferente. ¿En qué radica esa diferencia?Yo veo que, más allá de las retóricas y de las anécdotas, en esta elección, en realidad, hay solo dos modelos en confrontación. El modelo que representa el fujimorismo, que es el que, de una u otra manera, han seguido los últimos gobiernos, que sin duda tiene elementos buenos, pero con muchísimos defectos, con abandono del papel arbitral del Estado y del rol constructivo del sector público. Hemos tenido un modelo de privatizaciones sin competencia ni regulación que ha dejado desarmados a los ciudadanos frente a los abusos y ha dejado desarmados a los peruanos frente a los intereses extranjeros. Frente a eso, planteamos el modelo de desarrollismo democrático de Belaunde. No se trata de repetir experiencias de los años 60, sino rescatar su espíritu.

¿Las dos opciones que llegarán a la segunda vuelta?Por eso, yo le digo que la confrontación va a ser entre nosotros y Keiko Fujimori. Se trata de elegir entre modelos, más allá de una elección entre personas y anécdotas. Keiko y los otros candidatos son más de lo mismo.

¿Cómo piensa revertir su situación en las encuestas y posicionar su candidatura?No hay nada que revertir. Simplemente, no estamos en las encuestas porque no éramos candidatos. Pero quiero decirle algo más: en los países donde la política no funciona, aparece la 'encuestocracia' que reemplaza a la política. Las encuestas carecen de valor predictivo. Si revisas las encuestas de enero o febrero del 2001, 2006 y 2011, verás que no tienen nada que ver con los resultados de esas elecciones. De lo que se trata es de esa conversación con el país. Los ciudadanos peruanos son mucho más ilustrados y sofisticados que los encuestadores. Las encuestas son solo referencias pasajeras y no pueden ser un termómetro.

¿Cuáles son los ejes principales que se incluirán en su plan de gobierno?Es muy interesante lo que me pregunta y nos tomaría una larga conversación. Esencialmente, lo que nos proponemos es la reconquista del Perú por los peruanos. ¿Qué significa? Esto tiene dos dimensiones temporales para el corto y el largo plazo. Yo creo que el Perú puede ser un país desarrollado en 2030. Para eso hay que industrializar el Perú. Un país atado eternamente a las materias primas no se desarrolla. Para eso, necesitamos competitividad energética y ser potencia en Sudamérica.

Eso es para largo plazo.Claro, y para el corto plazo necesitamos acabar con la desigualdad y poner un piso común de ciudadanía y de igualdad para los peruanos en más y mejor empleo, en gratuidad de la salud y de la educación, en aumento de salarios, y lo que vamos a hacer es un millón de viviendas.

¿Cuando usted se presenta como una alternativa diferente, estamos hablando de reformas económicas?Sin duda. Este modelo "del piloto automático" paraliza al país y no lo lleva al desarrollo. El crecimiento económico ha servido más a los extranjeros que a los peruanos. Necesitamos un control sobre el precio de nuestros recursos naturales mucho más razonable.

¿Y lo que propone no pasa por cambiar la Constitución?Yo no quiero entrar a un debate jurídico. Este es un tema de cambios económicos, sociales y políticos fundamentales. Creo que falta más Estado, más inversión pública agresiva y una política de bienestar.

Los otros candidatos se presentan también como la opción para enfrentar al fujimorismo. ¿Por qué ellos no pueden ser la alternativa diferente?No solo no son la alternativa, sino que también fueron socios del fujimorismo. En 2011, el señor Kuczynski apoyó a Keiko Fujimori y Acuña era socio de Kuczynski. El único modelo alternativo será el de nosotros, con la vuelta al desarrollismo de Fernando Belaunde y la vuelta al centro progresista, y eso será visible a lo largo de la campaña.

¿Va a tener que enfrentarse a Alan García?Hay 16 o 19 planchas. Esto revela la terrible fragmentación y crisis del sistema político. Nosotros planeamos un programa y un equipo serio, no un sancochado.

Usted conoce al Apra. ¿Por qué no confiar en Alan García?Me he fijado una regla, no quisiera personalizar el debate. Lo que creo es que las políticas que representan esas candidaturas no representan el cambio que el país requiere.

AUTOFICHA

  • "Soy provinciano. Nací en la ciudad de Ica, donde estudié en mis años de escolar. Más adelante, estudié Letras en la Pontificia Universidad Católica del Perú y tengo una maestría en Administración Pública y Gobierno en la Universidad de Harvard".
  • "He viajado por todo el Perú en épocas no electorales. Publiqué seis libros, la mayoría de ellos sobre nuestro país, y me siento orgulloso de representar a un partido que restauró los cabildos abiertos y devolvió los medios a sus dueños".
  • "Gané las elecciones primarias en Acción Popular por mayoría absoluta, en un proceso desarrollado por la ONPE, y ahora comienzo, como candidato presidencial, una larga conversación con el país para exponer nuestras propuestas de cambios y reformas".

Por: Carlos castillo (ccastillo@peru21.com).

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