Joran van der Sloot confesó que asesinó a Natalee Holloway y le dan 20 años de cárcel

Fue durante muchos años el principal sospechoso, pero ahora se confirmó que sí cometió el brutal crimen. El holandés Joran van der Sloot admitió haberle quitado la vida de Natalle Holloway en Aruba el 2005.

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La madre de Holloway expresó que la declaración de culpabilidad del holandés puso fin a su interminable pesadilla.

“Hoy puedo decirles con certeza que después de 18 años el caso de Natalee está resuelto. Por lo que a mí respecta, se acabó. Se acabó”, dijo Beth Holloway a periodistas.

Y sentenció: “Joran van der Sloot ya no es el sospechoso del asesinato de mi hija, es el asesino”.

Por este caso, el holandés ha sido condenado a 20 años de prisión por la justicia estadounidense.

El caso

Como se recuerda, Joran van der Sloot fue durante años el principal sospechoso de la desaparición de Natalee Holloway, a quien conoció el 30 de mayo de 2005, en un bar de la ciudad de Orajestad, en Aruba. Él tenía 17 años y ella 18.

La joven había viajado hasta esa ciudad para celebrar su graduación, mientras que el holandés vivía desde 1990 en dicha isla junto con sus padres, el juez Paul van der Sloot y la profesora de arte Anita.

Ese fue el último día en que se vio con vida a Natalee Holloway, cuyo cuerpo no ha sido encontrado hasta la fecha. Entre los años 2005 y 2007, Joran van der Sloot fue detenido en varias ocasiones por este caso, pero siempre quedó libre por falta de pruebas.

Sentenciado en Perú

Si bien confesó su crimen en Estados Unidos, el holandés ya tiene una condena en Perú por el crimen de una joven de 21 años.

Van der Sloot conoció a Stephany Flores en un casino de Perú en el 2010. Luego, ambos fueron a una habitación de un hotel en Miraflores, donde ahorcó a su acompañante hasta causarle la muerte. De ahí huyó a Chile.

El 3 de junio de 2010, fue detenido en dicho país, que lo expulsó a los cuatro días. Ya en Perú, confesó el asesinato de Flores. En enero de 2012, fue sentenciado por el Poder Judicial a 28 años de prisión.

El holandés abandonó el penal de Challapalca en Perú -donde cumplía su condena- para ir hacia Estados Unidos donde es juzgado por la muerte de Natalee Holloway.

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