Cementerios tienen gran demanda y la muerte no conoce de mesetas

Algunos llegan hasta más diez días después de ocurrido el deceso, lo que demuestra que la capacidad del servicio para su registro en las entidades de salud y para recibirlos –en algunos camposantos– está superada. Esa es la realidad y aún están por venir semanas más difíciles, como advirtió –hace unos días– la jefa del Comando COVID-19, Pilar Mazzetti.

Campo Fe recibió ayer, en sus sedes de Puente Piedra y Huachipa, más de cien cadáveres para entierros. La mayoría de ellos fue víctima del coronavirus y, según cuenta su personal, cada vez llegan más.

El cementerio El Ángel, en tanto, experimentó uno de los días más fuertes en sus 64 años de creación. Recibieron 13 cadáveres para inhumar y, además, afuera de su crematorio hay dos contenedores llenos de ataúdes con nombres y apellidos, a la espera de ingresar al horno. Algunos ya no caben en ese almacén.

“Hoy ha sido un día bastante movido y lo más probable es que esto siga. Son 13 entierros de golpe entre 9 y 11 de la mañana. Los inhumadores cuentan que hace mucho el camposanto no experimentaba este tipo de demanda similar al tiempo del cólera o al terremoto del 70. El crematorio, que está concesionado, además tiene muchos cuerpos en espera”, explicó Daniel Cáceda, subgerente de Negocios y Cooperación de la Beneficencia de Lima. La situación se repite en otros camposantos de la capital y del país.

Hasta el día de ayer se registraron 4,230 fallecidos, 131 más que en la víspera, y 148,285 contagiados, 6,506 más que el jueves. Se han realizado 963,617 muestras.

La ministra del Ambiente, Fabiola Muñoz, sostuvo que aún no se sabe cuándo se tendrá una “meseta” de contagios en todo el país porque los casos seguirán prolongándose en algunas regiones mientras que en otras se espera “que no lleguen a subir tanto”.

“La gente está saliendo porque somos un país informal y necesitamos trabajar el día a día, pero eso no significa que alguien que tenga que trabajar se tenga que aglomerar. Ese es el mensaje más importante que queremos transmitir”, afirmó en Canal N.

La exministra de Salud Pilar Mazzetti, en tanto, indicó que debido a la actual situación se mantendrá la cifra de hospitalizaciones.

Sostuvo que para hacer frente a la demanda, el Estado contrató 4,800 camas de hospitalización y 230 camas para las unidades de cuidados intensivos.

“Deben estar implementadas en dos semanas y serán usadas en los siguientes tres o cuatro meses, de acuerdo con la necesidad en la atención a los pacientes afectados por el SARS-CoV-2”, dijo.

El director del Centro Nacional de Epidemiología, Manuel Loayza, explicó a Perú21 que el tema de hacer modelos matemáticos asociados a tener puntos máximos (o picos) no es tan sencillo y depende de variables.

Una de estas, detalló, es que hay problemas con el registro debido a la demanda y al poco personal. “Por ejemplo, de las seis personas que había en Iquitos para registrar los contagios y decesos, cuatro se enfermaron. Solo dos personas estaban operativas. Por eso hay diferencia de datos”, subrayó.

Explicó que eso crea un subregistro y que las cifras se van actualizando hacia atrás y por eso sería posible, dijo, que el jueves se hayan registrado seis mil nuevos contagios. “Los registros se están notificando de forma lenta porque lo importante ahora es curar a las personas”, puntualizó.

Otras variables son el mal uso de mascarillas y falta de distanciamiento entre personas. “Se creía que hace cuatro semanas íbamos a llegar al pico. Ahora no sabemos si va a ser ahora o después porque el contacto permanente se traduce en transmisión”, dijo.

-La Contraloría General de República recomendó al Minsa acortar los tiempos del procedimiento para el levantamiento de cadáveres por COVID-19 en las viviendas y en la vía pública, para disminuir el riesgo de contagio entre la población. ?

- En el cementerio El Ángel hay dos pabellones con 276 nichos para fallecidos por COVID-19. El Minsa los adquirió por 10 años.