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Canadá: Prohíben a extranjeros comprar viviendas durante dos años para controlar precios
La medida es para contrarrestar el costo de las residencias desde la pandemia y la creencia de que los compradores extranjeros adquirieron propiedades como inversión.
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El 1 de enero entró en vigor esta nueva ley aprobada por el Gobierno de Justin Trudeau. (EFE/EPA/CAROLINE BREHMAN).
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En Canadá prohibirán, durante los próximos dos años, la compra de viviendas a extranjeros no residentes. Esta ley aprobada por el Gobierno de Justin Trudeau tiene como objetivo el control de precios de las residencias tras el aumento desde la pandemia y la creencia de que los compradores extranjeros adquirieron numerosas propiedades como inversión.
Esta nueva medida tiene excepciones para los refugiados o los residentes permanentes, y la ley solo se aplica a las residencias urbanas y no a estructuras turísticas como las casas de veraneo.
Según ha explicado en los últimos meses Trudeau, en el mercado inmobiliario canadiense se han producido numerosas operaciones de especulación a manos de corporaciones e inversores extranjeros que han generado un problema de falta de vivienda y de precios disparados.
”Las casas son para las personas, no para los inversionistas”, ha insistido el presidente canadiense. Sí podrán comprar viviendas los refugiados y los residentes permanentes de Canadá que la vayan a usar como residencia principal.
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Esta medida fue propuesta por el Primer Ministro Justin Trudeau durante la campaña electoral de 2021. Su partido, el Liberal, se había quejado de que los inversores extranjeros hacían subir los precios, dificultando a los canadienses la adquisición de una vivienda. Se aprobó en primavera.
Cambios en el mercado inmobilario
El mercado inmobiliario se ha ralentizado recientemente, ya que el banco central ha subido los tipos de interés para frenar la inflación.
Según la Asociación de Agentes Inmobiliarios, el precio medio de una vivienda fue de 630.000 dólares canadienses (465.000 dólares estadounidenses, 435.000 euros) el mes pasado, frente a los 800.000 dólares canadienses de hace un año.
Algunos expertos dudan de que la medida sea eficaz porque los extranjeros representan menos del 5% de los propietarios de viviendas en Canadá, según la agencia nacional de estadística. Estiman que sería mejor acelerar la construcción de nuevas viviendas.
La Corporación Hipotecaria y de la Vivienda de Canadá, la agencia nacional de la vivienda, señaló en un informe de junio que en 2030 se necesitarán cerca de 19 millones de viviendas.
Eso significa que habrá que construir 5,8 millones de viviendas nuevas, es decir, 3,5 millones más de las que se prevé construir en la actualidad para satisfacer esa demanda, con información de AFP.
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