Esta semana se realizará la ‘Toma de Lima’ y muchos sectores han mostrado su preocupación por la posibilidad de que se repitan los hechos del primer trimestre del año que perjudicaron sus ventas. Por ello, el presidente de la Asociación de Bodegueros, Andrés Choy, precisó que existe temor de que se pierdan “millones de dólares por las manifestaciones”.
“Estas protestas nos afectan bastante, sobre todo a las empresas que están cerca de donde se desarrollan. Vemos muchas veces que se desarrollan actos de vandalismo y hasta amenazas”, aseguró a este diario.
El retorno del temor y la incertidumbre entre las bodegas no es para menos. Solo como referencia, en el trimestre pasado cerraron aproximadamente 10,000 micro y pequeñas empresas (mypes) debido a los conflictos, según datos del gremio Mypes Unidas del Perú.
Choy, en ese sentido, destaca que a inicios de año hubo negocios en la zona del sur del país que tuvieron que cerrar sus puertas, por lo que esperan que esta situación no se repita esta semana.
“En el sur hay aproximadamente 40,000 bodegas, dependiendo de la zona donde se realicen las protestas y la intensidad de las mismas; estos negocios podrían afectarse. Por ahora no sabemos lo que ocurrirá”, añadió.
El representante gremial hizo un llamado para que los dejen trabajar y las marchas se realicen “con tranquilidad y sin actos vandálicos”, pues estos los terminan perjudicando.
En la capital, el Centro de Lima suele convertirse en el punto donde se desarrollan las manifestaciones, lo que afecta a los negocios de la zona. Por ello, Roberto Díaz, presidente de la Asociación de Importadores Medianos (Aimpe) de Mesa Redonda, explicó que lo que más les preocupa a los emprendedores y empresarios de esta zona comercial son los saqueos.
“Lo bueno es que las marchas han sido avisadas con tiempo, lo que nos permite organizarnos. Cuando es inesperada, nos afecta aún más”, dijo.
Asimismo, señaló desde Mesa Redonda que ya han coordinado con representantes del Ministerio del Interior acciones para resguardar los negocios de la zona, tomando en cuenta, además, que se encuentran en plena campaña de Fiestas Patrias.
Hoy, lo que les genera mayor incertidumbre son los problemas que tienen para importar productos para la temporada de fin de año, principalmente los juguetes.
“Las personas se están desalentando para importar juguetes, y eso puede significar un incremento de los precios de los mismos. Los plazos y los permisos han aumentado y eso nos está golpeando”, advirtió.
Datos:
El gremio Mypes Unidas del Perú estimó que alrededor de 450,000 negocios en el sur del país están en peligro por las protestas.
A inicios de año, las manifestaciones ocasionaron que el 95% de las reservas en Cusco fueran canceladas.