Si bien la industria cultural fue uno de los primeros sectores en verse afectados por la pandemia del COVID-19, ha sido también de los primeros que idearon e impulsaron nuevos mecanismos de apoyo para resistir y reestructurarse, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
“Muchas de las actividades culturales como las artes escénicas, música, se han tenido que reconvertir con el uso de las tecnologías, lo que ha obligado a forzar la creatividad de los actores para aprovechar de la virtualidad”, dijo el ministro de Cultura, Alejandro Neyra, durante la presentación del informe “La Economía Creativa”.
“Se han tenido que aprovechar los canales tradicionales, como la televisión y el cable; hay ejemplos de cómo el teatro se ha movido en este ámbito, pero sobre todo a la virtualidad y a lo digital. Este año hemos visto la aceleración digital en este último año y que tiene un crecimiento mayor en adelante, y eso es lo que no vamos a perder”, agregó Neyra.
MIRA: Expectativas de contrataciones empresariales mejoran para el tercer trimestre
El titular del sector consideró que Perú cuenta con una gran oportunidad para explotar la economía creativa en el país. Asimismo, señaló que se busca que la gente comprenda que el patrimonio cultural no solo está expresado en sitios arqueológicos sino también en patrimonio inmaterial como las expresiones culturales tradicionales que los pueblos y comunidades mantienen.
De acuerdo con el estudio “La economía creativa en el Perú”, realizado por la firma Niubox por encargo de DirecTV, el desarrollo de las industrias creativas en Perú aún es disparejo y registra singulares características acordes al quehacer cultural peruano.
El reporte destaca que se debe dar impulso a sectores como la industria cinematográfica, el contenido audiovisual u otros que se acompañen de recursos y medios tecnológicos para su difusión. También plantea una discusión que permita conocer cuáles son las dinámicas de las expresiones, industrias y disciplinas artísticas en el país.
MIRA: BID: “La gente exige más información, más integridad, menos impunidad y sobre todo, menos indiferencia”
En ese sentido, Gustavo Larrabure, gerente de Asuntos Externos y Regulatorios de DirecTV Perú, dijo que es necesaria la creación de una agenda pública, que gestione de manera adecuada la creatividad, conocimiento, propiedad intelectual, derechos de autor y otras actividades, con objetivos de corto y mediano plazo.
¿Qué es la economía creativa?
Es un modelo que busca que las ideas creativas de las empresas y/o emprendimientos se conviertan en bienes y servicios culturales productivos, capaces de capitalizar dinero.
La economía creativa o “economía naranja” está compuesta por una industria dividida en dos áreas:
- Bienes creativos, conformado por las artes visuales y escénicas (cine, teatro, radio y streaming), las artesanías, los diseños de moda, los softwares, entre otros.
- Servicios creativos, conformado por los entretenimientos, juegos, videojuegos, arquitectura, publicidad, entre otros.
Algunos de los principales beneficios de promover su crecimiento es que permite generar nuevos puestos de trabajo, elimina brechas, protege la cultura, promueve la innovación y tecnología, cubre demandas, y contribuye a la formalización (laboral y audiovisual).