En la presentación del Reporte de Empleos, Salarios y Desaceleración Latinoamericana del Banco Mundial, se señaló que en los años de bonanza se generaron empleos y aumentaron los salarios, pero ahora, bajo la coyuntura actual, se está empezando a dejar de generar puestos de trabajo y los más afectados son hombres jóvenes con un bajo nivel de educación.
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En el 2000, surgió un incremento de la demanda por trabajadores; los de mayor destreza escaseaban y las empresas optaron por contratar a los menos capacitados, haciendo que aumenten los salarios a todo nivel.
Sin embargo, hoy la demanda se contrae y ello, en consecuencia, lleva al desempleo. Siendo así que las personas que salieron de la pobreza y no lograron consolidarse en la clase media podrían regresar a la condición de pobres.
OPINIÓNEl ex ministro de Economía Luis Castilla señaló que el impacto en el mercado laboral no es cíclico, y la política contracíclica no podrá mejorar esta situación.
Así, recomendó crear una red de protección social, ya que los programas sociales no están dirigidos a una población urbana joven con bajo nivel educativo. Esa mano de obra desempleada se queda sin ayuda.
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Por ello, es necesario potenciar la microempresa y revisar la legislación laboral, ya que debería haber una reducción de costos no laborales que motive la formalización.
Michael Shifter, presidente de Diálogo Interamericano, indicó que durante la crisis ganan protagonismo la corrupción y la desconfianza, lo que hace más difícil el trabajo de las autoridades para reactivar sus economías, pues deberán realizar reformas fiscales sin descuidar las políticas sociales.
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