Un Guerrero llorando en Río de Janeiro…

Todos sabíamos que ir a la UCV era una difícil decisión, pero -a priori- parece que fue la peor.

Fecha Actualización

11/02/2024 - 08:28

¡Alerta! La Marina de Brasil reporta una sorprendente crecida del mar en las playas de Río de Janeiro y hasta los más grandes expertos dudan si la causa es o no natural. Lágrimas aparte, esas mismas playas fungen hace un par de semanas de centro de alto rendimiento para nuestro querido Paolo Guerrero.

“Acabou o caô”, cantaban los hinchas de Flamengo hace algunos años y hoy es todo lo contrario en la vida del centrodelantero, que, dicen por ahí, no está para nada contento con la posición, los resultados y, sobre todo, con el rendimiento de su nuevo equipo, la Universidad César Vallejo.

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Recordemos que, hace algunas semanas, el ‘Depredador’ decidió dejar su mansión en Barra da Tijuca por otra en Huanchaco, en las orillas trujillanas. Y, desde ya, la Marina peruana pronostica anomalías, fuertes crecidas y hasta cierres indefinidos por oleajes anómalos sin un factor natural conocido.

Y tal vez ese será el precio a pagar por resistir, por luchar, por no querer dejar de jugar, por negarse un retiro ejemplar y acabar defendiendo un club que nunca fue campeón y que, sin dudas, disculpando a los lectores del norte, no está a la altura del máximo goleador histórico de la selección.

Una derrota, una ajustadísima victoria y otra derrota. Ocho goles en contra. Tres partidos, tres puntos. No hay juego ni jogo bonito. A ese equipo se unirá el campeón mundial de clubes, campeón de la Sudamericana, subcampeón de la Copa América, capitán de la bicolor y mundialista en Rusia 2018.

Paolo Guerrero llegará entre lunes y martes a la tierra que lo vio nacer y su presencia -a como dé lugar- generará revuelo al cien por cien. Pero su paso será efímero por el primer puerto, ya que, casi inmediatamente, tendrá que embarcarse en otro vuelo para ponerse a las órdenes de su nuevo técnico.

Solo el tiempo dirá si Paolo Guerrero hizo lo correcto al dejar las playas de Río de Janeiro.