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Hacer un desnudo no le aportaría nada a mi carrera
“La juventud es un estado mental. Yo me siento muy joven”, nos dice Lucecita, modelo, animadora, actriz cómica y hasta creadora de algunos versos.
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Lucecita,ModeloGonzalo Pajaresgpajares@peru21.com
Si hoy eligiésemos a las mejores piernas de la farándula, Lucecita estaría entre las favoritas. Pero no todo es belleza en ella: también escribe y logra sacarnos algunas sonrisas como actriz cómica de El especial del humor (sábados, 9 p.m., Frecuencia Latina).
¿Sigues escribiendo?Sí, en mis ratos libres y de inspiración. No son muchos, porque estoy con bastante trabajo y estos días prefiero destinar mis ratos libres a mis hijos. Sin embargo, sí me doy tiempo para inspirarme.
Ibas a publicar un poemario…Lo he dejado en stand by porque decidí dedicarme a mi faceta de actriz cómica en El especial del humor. Pero pronto lo retomaré. Todo es cuestión de ponerse las pilas.
¿No temes que, a través de tus textos, te conozcamos más?(Ríe). Me entusiasma que conozcan más de mí, más allá de lo que ven en la pantalla, más allá de un vestido algo alto (ríe), más allá de lo físico. Quiero que la gente conozca a esa Lucecita que no se muestra en TV, a la Lucecita que desnuda su alma, porque eso es lo que hago en mis poemas. Sé que mucha gente se va a identificar con lo que siento, con lo que me atormenta.
¿Desnudarías tu cuerpo?No está en mis planes. Está de moda desnudarse, pero yo no hago nada por moda, lo hago por convicción y porque me hace bien. Para hacerlo necesitaría otra motivación.
¿El dinero?Tampoco. Haciendo lo que hago –actriz, animadora– estoy contenta. Es más, hay gente que se desnuda y ni siquiera le pagan. Desnudarme no le aportaría nada a mi carrera.
Yo sospecho que tus poemas de amor no están dedicados a tu esposo…(Ríe). No te equivocas. Están dedicados al amor en sí, y el amor tiene muchas formas. A veces hay que escribir de forma general para que el lector sienta lo mismo que tú. En mis textos hay mucho de mí, pero también mucho de fantasía.
*García Márquez escribió: "Nada de lo que se hace en una cama es pecado si se lo hace con amor". ¿La suscribes? *Tengo mis límites. Allí, a pesar de que lo respeto, discreparé con García Márquez.
Tienes un cuerpazo…Hay que ser contundente en todas las áreas de nuestras vidas: en lo espiritual, en lo físico, en lo emocional. Somos bastante complejos, por qué preocuparse solo por una área. Soy apasionada en todo: cuando escribo, cuando me arreglo.
¿Por qué decidiste convertirte en una actriz cómica?Fue el destino. Varias veces estuve invitada en El especial del humor y siempre estuvieron contentos con mi desempeño. Una vez hicimos una parodia donde me iba a Palacio de Gobierno a visitar a Alan García. Fue muy divertida. Y también conozco al verdadero García.
¿Qué te dijo?Coincidimos en una conferencia. Cuando terminó gritó: "Lucecita, no te vayas sin despedirte". Me maté de la risa. Me pareció una persona con mucho carisma, habla muy bien y es encantador.
¿Te pareció atractivo?Me pareció agradable. Nunca me puse a pensar en su físico, vi su forma de ser.
¿Estarías con un hombre como Alan García?No es un referente, pues ya tengo a mi esposo (ríe), no me puedo proyectar. El físico no me interesa, lo importante es que me quiera, que me respete… así se llega a mi corazón. Si ya estoy 18 años con mi esposo es porque tiene muchísimas virtudes: es tolerante, inteligente, me respeta y, lo que todas las mujeres pedimos, es fiel… o yo no me doy cuenta de nada (risas).
¿Te ha costado ser fiel?No, cuando amas nada te cuesta. A todos se nos presentan tentaciones, mas no hay pecado en la tentación sino en ceder a ella. Yo me doy cuenta cuando las personas tienen otra intención conmigo y sé manejarlo con tino, sin necesidad de ser grosera, sin dar una cachetada, solo con unas palabras bien puestas.
¿Eres celosa?Sí, pero no enfermiza.
¿Tus hijos te celan?Sí. Mi hijo mayor es más celoso que mi esposo. Pero, cuando salgo con ellos no lo hago despampanante, sino como una mujer normal. Eso sí, nunca salgo desarreglada… hasta en mi casa estoy arregladita.
¿Qué dicen de tu trabajo?Les gusta mucho. Nosotros veíamos El especial del humor, por eso, les agradó que entrase a trabajar allí. Pero son muy críticos: "Mamá, ¿qué pasó con ese besito?".
¿Te sientes divertida?Sí. La cámara se lleva bien conmigo. Y me siento espontánea.
¿Ya te sientes peruana?Sí, muy peruana, y más que por los años que vivo acá, por lo querida que me siento. Claro, tengo mis detractores pero los admiradores son más (ríe).
AUTOFICHA
- En El especial del humor hay un feeling extraordinario, somos un elenco con química. Hay gente muy buena. Nunca me sentí incómoda, pero hoy me siento como en casa.
- Extraño Colombia. No voy hace cuatro años. Mis obligaciones me lo impiden. Y no, no me quedaría. Quizás si no tuviese mis dos hijos, lo haría.
- Soy una mamá gallina. Soy muy amiga de mis hijos. A veces creen que soy su hermana y sufro para imponerles respeto. Les digo: "Recuerden, soy su madre".
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