A raíz de la agresión de Adriano Pozo contra su ex pareja Cindy Contreras —que se registró en un hotel de Ayacucho— el padre del sujeto alegó que su hijo sufre de trastorno límite de personalidad (TLP) o borderline y hace unos meses habría abandonado el tratamiento.
A inicios de julio pasado, la actriz Anahí de Cárdenas reveló en Twitter que también sufría de TLP y de depresión. Pero, ¿qué es el borderline y cuáles son sus síntomas? Aquí te ayudaremos a despejar esta duda con la respuesta de un especialista.
Perú21 se comunicó con el Jefe de Servicio de Psiquiatría Infanto Juvenil del hospital Guillermo Almenara de Essalud, Bernardo Cano Uría, quien nos brindó mayores alcances de cómo esta alteración mental afecta a las relaciones sociales de los pacientes cuando no está bajo un tratamiento médico.
Al ser consultado sobre la definición del trastorno límite de personalidad (TLP) o borderline, el especialista explicó que "es una patología mental grave que se expresa en la inestabilidad en las relaciones interpersonales, afecto y autoimagen con escaso control de impulsos, cambios de humor, pérdida de la confianza, conductas impulsivas y de autodestrucción".
Existen factores genéticos, emocionales y psicosociales que inciden en las causas de esta compleja patología, que conlleva un riesgo de suicidio (entre el 8% y 10% de pacientes consumaron el acto) a quien la padece.
CARACTERÍSTICAS DE UN PACIENTE BORDERLINEEntre las principales características está "una marcada predisposición a actuar de forma inesperada y sin tener en cuenta las consecuencias, marcada predisposición a un comportamiento pendenciero y a tener conflictos con los demás, en especial cuando los actos impulsivos propios son impedidos o censurados, predisposición para los arrebatos de ira y violencia, con incapacidad para controlar las propias conductas explosivas".
El médico psiquiatra Cano Uría agregó que estos pacientes también presentan ideas paranoide transitorias relacionadas con el estrés o síntomas disociativos graves, es decir, que desarrollan un distanciamiento con la realidad, alteraciones pasajeros en la conciencia.
Respecto al consumo de alcohol o drogas en los pacientes con TLP ya vulnerables por el escaso control de los impulsos, solo favorece el agravamiento de los síntomas.
APOYO FAMILIARSegún el especialista, si los pacientes reciben ayuda médica pueden integrarse social, laboral y afectivamente.
El apoyo de la familia también debe reforzar en ellos la necesidad de someterse a un tratamiento psicoterapéutico y psicofarmacológico. Si esta ayuda es temprana, es decir, cuando recién surgen los síntomas, el pronóstico puede ser muy favorable.