Tras quedarse viuda, Ruthie Shuster no ha dejado de trabajar. (Foto: @WTAE / Twitter)
Tras quedarse viuda, Ruthie Shuster no ha dejado de trabajar. (Foto: @WTAE / Twitter)

Se dice que y que lo que importa es la actitud con la uno vive. Podríamos decir que esta frase resume a la perfección la historia de Ruthie Shuster, una mujer de Irwin (Pensilvania, Estados Unidos) que hace algunos días cumplió 100 años. No lo hizo sentada en una silla de ruedas o descansando, sino trabajando en una cadena de comida rápida, en donde labora desde hace 50 años.

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No se trata de un caso de explotación laboral ni necesidad económica pues, según cuenta Ruthie, la mejor manera de lidiar con el fallecimiento de su esposo fue trabajando y tratando a diario con los clientes del restaurante. “Me quedé viuda cuando tenía 50 años y he estado trabajando desde entonces. Me encanta trabajar”, declaró en conversación con la cadena WTAE. “Para mi, es solo un número”, dice cuando se le consulta sobre su edad.

Ella no puede evitar alegrarse al estar rodeada de gente, lo que la ha popularizado no solo entre los clientes, sino también en la ciudad. Varias personas pasan por el local solo para conocerla. La cadena, en respuesta, instaló un buzón para que, quien lo desee, le deje una tarjeta de felicitaciones.

“¡Recibo el día de paga! Me pagan, pago mis cuentas y eso es bueno. Nunca tuve mucho dinero, pero siempre tuve suficiente”, dijo Shuster cuando se le preguntó por qué ama tanto su trabajo.

Agregó que aún tiene para rato y que, a pesar de su edad, retirarse no es algo en lo que piense.

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