Varios países del mundo continúan con estrictas medidas de cuarentena para evitar el contagio del COVID-19 entre sus habitantes. Es el caso de Escocia que mantiene algunas disposiciones en ciertas ciudades, situación que ha llevado a la desesperación a los adultos mayores. Mary Fowler, de 104 años, es una de las personas que ha suplicado a las autoridades le permitan ver a su familia, pues siente que su tiempo de vida se acorta con cada día que pasa. Su desgarradora historia es viral en Facebook y demás redes sociales, y nos hace reflexionar sobre la importancia de estar cerca de nuestros seres más queridos.
A través de un video publicado en Twitter, por la cuenta de Care Home Relatives Scotland (un hogar para ancianos), Mary Fowler cuenta todo la tristeza que siente al estar alejada de sus hijos por siete meses, tiempo que lleva guardando cuarentena desde que se reporta la aparición del COVID-19 en territorio escocés.
“Estoy muy bien atendida aquí, pero quiero a mi familia. Este es mi derecho. Por favor, ayuda. Me están cortando en pedazos. Tengo que ver a mis hijos, se me está acabando el tiempo. Debo ver a mis hijos y hacer las cosas como solían ser. Por favor, ayúdame”, se puede escuchar en el video viral que grabó y que ha provocado la más profunda tristeza en los internautas.
La realidad es dura pues Mary Fowler pertenece al grupo de población vulnerable por su avanzada edad, pero al mismo tiempo los cibernautas comprenden la situación tan triste que atraviesa la mujer de 104 años pues desde hace siete meses no puede ver a sus hijos, nietos ni bisnietos.
Tras el rebrote del coronavirus, las autoridades han dispuesto nuevas restricciones para todo Reino Unido, mientras que específicamente en Escocia la Primera Ministra, Nicola Sturgeon, afirmó tener conocimiento de la situación que vive Fowler y los residentes de hogares para ancianos, por lo que aseguró que se evaluará dar pruebas de COVID-19 a los familiares de los adultos mayores.