DENUNCIAS SIN FIN. Más casos ponen en duda su calidad ética. (IMAGEN TOMADA POR MOTOROLA G100)
DENUNCIAS SIN FIN. Más casos ponen en duda su calidad ética. (IMAGEN TOMADA POR MOTOROLA G100)

Alejandro Soto deberá extender los ya largos días de explicaciones que le ha demandado defenderse de las denuncias en su contra. Otra historia de su vida, oculta, que prefirió no contar, estira aún más las dudas sobre la ya mellada transparencia del flamante presidente del , y sobre ese valor ético que se le exige para estar al frente del Parlamento y que tanto defendió en su conferencia del último viernes.

Resulta ahora, a pesar de haberlo negado, que Soto sí mantendría una deuda con el Estado, pues en sus épocas de regidor del distrito cusqueño de Santiago, el hoy titular del Legislativo habría cobrado, de manera irregular, 21,092 soles en dietas por sesiones a las que no asistió y por sesiones que nunca se realizaron, según reveló un informe de Panorama.

El reportaje señala que el entonces concejal distrital no cobró por sesiones ordinarias sino por sesiones solemnes, las que no generan dietas. Según la ley orgánica de municipalidades, los regidores tienen derecho a percibir dieta por sesión ordinaria. La prohibición, sin embargo, no pareció importarle a Soto.

MIRA: Jorge Lanata, periodista argentino: “Es la primera vez en 40 años que estoy desconcertado”

La Contraloría detectó esta irregularidad y en 2008 su demanda fue admitida, según revela el programa dominical, que indica que, tras seis años de proceso, el primer juzgado de paz letrado sentenció a Soto a resarcir al Estado el perjuicio económico que sus cobros ilícitos generaron, ordenándole a pagar la suma de 20 mil 642 soles. Ante la resolución judicial desfavorable, Soto buscó dilatar el proceso y apeló la sentencia. Su pedido no fue admitido y en 2015 se confirmó la orden judicial en su contra, aunque tampoco se interesó en pagar lo que debía.

Un año después y ante su incumplimiento, el juez lo conminó a pagar su deuda con el Estado en un plazo de cinco días. Soto depositó a cuenta de lo ordenado apenas mil soles, aduciendo que esas eran sus posibilidades económicas. Este monto no representaba si siquiera el 5% de la deuda total. Según Panorama, este es el único pago que realizó el apepista, de acuerdo con el seguimiento que hizo del expediente. En 2018 el caso fue enviado al archivo transitorio. La deuda sigue siendo exigible, Soto continúa debiéndole al Estado, y está en manos de la Procuraduría reactivar el proceso.

ASESORES TROLLS

Soto no solo deberá explicar eso. Otro reportaje televisivo, esta vez de Cuarto poder, reveló chats que evidenciarían que en 2022 trabajadores de su despacho congresal financiaban mensualmente de ‘manera voluntaria’ el financiamiento de publicidad en una red social y presuntos pagos a conductores de programas de Cusco, con el fin de cuidar y limpiar la imagen del hoy cuestionado presidente del Parlamento.

Pero, además, las conversaciones de sus empleados pondrían al descubierto que estos actuaban como trolls pagados con dineros del Estado. “Todos a responder con sus cuentas, ya que no podemos eliminarlos. Melissa, Yeshira, ¡urgente! Repliquen con sus familiares también. Edgar está respondiendo” / “Sugiero que utilicen sus cuentas falsas para evitar que nos respondan diciendo que trabajamos con el Dr. (presuntamente Soto)”, son algunos extractos de los diálogos.

VIDEO RECOMENDADO:

Andy Carrión sobre Alejandro Soto