Sanguinario atentado.  Delincuentes terroristas esperaron a los policías en una curva de la carretera.
Sanguinario atentado. Delincuentes terroristas esperaron a los policías en una curva de la carretera.

Por: Joma Gálaga y Junior Meza

Alrededor de las 9:45 a.m. del sábado último, siete efectivos de la perdieron la vida en la zona del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (), en la provincia de La Convención (Cusco), luego de una emboscada que, según señaló a Perú21 José Zavala, jefe de la Dircote, fue ejecutada por remanentes del grupo terrorista Sendero Luminoso, hoy dedicados al narcotráfico.

“Este fue un ataque guerrillero, que es una de las formas de acción de Sendero Luminoso que actúa aún en esa zona. Fue una columna del autodenominado Militarizado Partido Comunista del Perú”, mencionó Zavala.

Los policías fallecidos pertenecían a la División Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes) y a la comisaría del centro poblado Natividad, en el distrito de Pichari.

Sangrienta escena del crimen.
Sangrienta escena del crimen.

Fuentes de Perú21 han informado que el asalto se registró en una curva cerrada de la mencionada localidad perteneciente al Vraem. Según mencionaron a este diario, la unidad policial fue sorprendida por una camioneta, desde la cual empezaron a disparar contra los agentes del orden.

La frialdad de los delincuentes fue tal que incluso asesinaron a una mascota que pertenecería a la unidad policial de esa localidad. Se supo que los criminales se llevaron los armamentos de los agentes policiales, específicamente siete fusiles y armas cortas.

Fuentes de inteligencia militar aseguraron a Perú21 que el asesinato habría estado a cargo de narcoterroristas con apoyo de la columna senderista de ‘Leonardo’, ya que por la zona fueron vistos en los últimos días.

Pobladores del lugar también contaron que, después del ataque, una camioneta de color blanco pasó a toda velocidad por la comunidad nativa de Mimirini, como si estuviera en plan de fuga.

Las víctimas fueron identificadas como Alfredo Loayza Carbajal, Luis Alberto Cerrón Palacios, Wilder Eliseo Conozco, Ivan Muñoz Fasabi, Sandro Lorenzo Fergus Villegas Corahiua, Williams Quispe Anchay y Saul Huarco Samaniego.

Capitán llegó herido a Lima.
Capitán llegó herido a Lima.

Otras fuentes policiales señalaron a este diario que los senderistas que atacaron en el Vraem habrían tenido información precisa de dónde y a qué hora pasaría la patrulla con los efectivos. En ese sentido, no descartaron que delincuentes de esta organización se hayan infiltrado en sus filas, lo cual sería grave.

Al respecto, José Zavala mencionó que, si bien no ha escuchado sobre esta hipótesis, su unidad comenzará a indagar sobre el tema.

Pedro Yaranga, experto en seguridad integral y temas sobre narcotráfico, recuerda que, tras la operación Patriota, los remanentes intentaron hacer emboscadas. “Al parecer, esto fue un error de rutina. Los terroristas siempre están pendientes de los desplazamientos de las FF.AA. y la PNP, y son capaces de esperarlos días con los grupos de ataque”, mencionó Yaranga.

Respecto de la existencia de posibles infiltraciones del narcoterrorismo en la PNP, mencionó que es una probabilidad dentro de las hipótesis

TENGA EN CUENTA

Prendas y alimentos fueron encontrados en la zona donde abatieron a los policías, por lo que se presume que los remanentes senderistas habrían estado en la zona de la emboscada desde días antes.

El capitán PNP Erwin Mego Villogas quedó gravemente herido, pero sobrevivió al ataque y fue trasladado a Lima, según declaraciones del general PNP Jorge Luis Angulo.

JOSÉ BAELLA, exjefe de la Dircote:“SL se ha reforzado con traficantes de drogas”

“Esto ha sido un atentado terrorista cometido por los remanentes de Sendero Luminoso en el Vraem. ¿Quién ha estado a cargo? El cabecilla es el camarada ‘José’, Víctor Quispe Palomino, y toda su hueste. Han asesinado a siete policías como consecuencia de un trabajo previo y planificado. Lo que hacen los Quispe Palomino es un seguimiento y observación previa de cuál es el desplazamiento de las fuerzas del orden, especialmente en el Vraem. Yo pienso que ha habido un exceso de confianza tras la operación Patriota. Esto tiene consecuencias, como salir sin medidas de seguridad, no llevar el armamento correcto. Una móvil en el Vraem no puede andar sola; esa es la forma de tomar medidas. El exceso de confianza muchas veces traiciona, pero esta situación se debe investigar administrativamente en la PNP para que no vuelva a suceder. Mi hipótesis es que Sendero Luminoso se ha reforzado con traficantes de droga de la zona”.

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