JOAQUIN REY
JOAQUIN REY

El economista Joaquín Rey conversó con Perú21 TV para realizar un análisis del mensaje a la Nación dado por la presidenta este 28 de julio.

¿Qué te pareció el discurso de Dina Boluarte?

Creo que fue un mensaje excesivamente largo. Fue políticamente no muy conducente, un poco torpe. Veintiocho de julio es una oportunidad excepcional, para trazar dirección y transmitir mensajes con los que la población debe quedarse. Dina Boluarte ha hecho lo que se conoce como una ‘lista de lavandería’ a un nivel de detalle que creo que no es el espacio. En ese sentido creo que ha sido torpe.

Y a un nivel político la lectura creo que es que Boluarte apuesta por la continuidad, esa alianca tácita que hay con el Congreso para la permanencia. Hay un distanciamiento con Pedro Castillo y con aquello que ella denunció en su mensaje como corrupción. Además, se mantiene en la línea que ya había dado su gobierno respecto a las protestas que tuvo el país a inicios de año y más recientemente en julio.

Si bien pidió perdón por los muertos, no señaló nada respecto investigaciones o responsabilidades o justicia para las víctimas que es algo que se le exigía. El mensaje no cambia mucho el panorama, es un poco mantenerse en la línea que ya tenían la presidenta y el premier.

Algo preocupante es que no usó el espacio para hablar de reactivación económica, fue un tema que recibió poca atención y era un tema central. Si hay un tema en Perú ahora es la expectativa de crecimiento muy baja. Las proyecciones están entre 1% y 1.5% y eso es algo realmente trágico porque va a significar un aumento en la pobreza. Yo no veo que la presidenta haya planteado medidas o estrategias concretas para eso. No ha recibido el lugar que debería haber recibido en un mensaje a la nación.

¿Qué medidas te habría gustado escuchar en cuanto al crecimiento económico?

Lo primero que había que hacer es reconocer la existencia de problemas o del reto si quieres decirlo así. No ha habido casi una mención al tema. Digamos en la fase de reactivación económica, la presidenta se limitó a hablar del programa ‘Punche Perú', que es un programa que yo considero que no está a la altura del reto que que tiene el país, porque es un programa que básicamente asigna gasto público en ciertos sectores, a contribuir al a la dinamización de la demanda a través de gasto público y también a través de una serie de apoyos más vinculados a programas sociales. Pero aquí el gran tema es la inversión privada.

En el primer trimestre el Perú ha tenido una contracción de la acción privada del 12%. Eso es una cosa altísima. En el decir si se excluye el año de la pandemia, probablemente hace dos décadas que no se vio una contracción tan grande en la inversión privada. Y no tendría por qué, realmente. Y en cuanto al nivel de inversión minera, la contracción ha sido de casi del 25% en este primer trimestre. La inversión privada representa el 80% de la inversión total y por lo tanto, si es que no hay medidas que contribuyan a que la inversión privada se acelere, pues es poco lo que va a poder hacer el Estado.

La inversión pública no es tan significativa, se mueve más lento el gasto público. Entonces ahí ha faltado algo definitivamente y no veo que desde el MEF hayan estas cosas tan claras en esa dirección. Es algo que debe preocuparnos porque el tema del crecimiento es muy importante. Es muy concreto: cuando no hay crecimiento, la pobreza se incrementa. Es lo que pasó el año pasado y es lo que va a pasar este año también. Es realmente trágico que luego de que el Perú haya avanzado tanto en reducción de pobreza entre el 2004 y el 2016, y haber llegado a recortar la pobreza a la mitad de lo que está, pues ahora estar subiendo de nuevo es algo que no hubiera pasado.

Y además teniendo fundamentos económicos buenos sólidos, una deuda baja, un déficit fiscal controlado, un Banco Central independiente, un MEF todavía relativamente profesional, no habría razón para tener un desempeño económico mediocre, y preocupa que en el Ejecutivo no haya sentido de urgencia al respecto.


¿Cómo calificas el hecho de que la presidenta haya puesto en agenda el alza del salario mínimo vital?

El tema del salario mínimo siempre se usa como una herramienta de demagogia, y no debiera ser así, porque el salario mínimo debe responder a los niveles de productividad de la mano de obra, porque cuando uno fija un salario mínimo que está muy por encima el nivel de la productividad la mano de obra, eso genera informalidad y está estudiadísimo.

Entonces el salario mínimo debe obedecer a un proceso de evaluación técnica. Es positivo que el Consejo Nacional del Trabajo se haya reinstalado. Creo que eso es algo que sí se puede destacar que se ha logrado en esta gestión. Debiera ser ese el espacio para tener un debate técnico sobre la metodología a emplear para hacer revisiones metodológicas programadas del salario mínimo, pero no porque un político diga que hay que subirlo. No creo que ese sea el camino correcto. Me parece que es un poco irresponsable.


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