El jefe del gabinete, Juan Jiménez, parece seguir de mal humor con la prensa y hoy se molestó cuando le consultaron por la amenaza de Sendero Luminoso al gasoducto de Camisea, que tras incendiar tres helicópteros ha puesto en jaque y hasta 'declarado' zonas liberadas a Kiteni y Kepashiato, en el Cusco.
"Yo quisiera pedir a la prensa mayor responsabilidad y madurez para tocar estos temas delicados para el país. La seguridad que está brindando el Comando Conjunto de la Fuerzas Armadas está garantizada", afirmó el premier.
Sin embargo, la realidad de los hechos contradice su declaración y el mismo ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, admitió que es probable un ataque al ducto, porque es complejo resguardar los 700 kilómetros de tuberías.
Por si fuera poco, Jiménez Mayor consideró que "se está haciendo una novela" sobre este tema, por lo que instó a los periodistas a "transmitir tranquilidad a la población" porque, según dijo, el Gobierno sigue firme en su objetivo de pacificar el VRAEM.
"Como ustedes saben, comienza la temporada de lluvias en esa zona y el sistema de mantenimiento disminuye. Así que yo no hablaría de un éxodo de obreros, sino que es la normal reducción de personal en este tiempo", afirmó en conferencia tras una nueva sesión del Consejo de Ministros.
