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Freddy Díaz: Aprueban informe que lo inhabilita para la función pública tras denuncia de violación
El entonces legislador de Alianza para el Progreso –según el testimonio de la agraviada– la “presionó para brindar” por la elección de Camones como presidenta del Legislativo.
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Por unanimidad, la Comisión Permanente del Congreso aprobó el informe que recomienda la inhabilitación del suspendido congresista Freddy Díaz Monago para el ejercicio de la función pública por un periódo de 10 años al haber incurrido en infracción de varios artículos constitucionales al haber bebido licor y sostenido relaciones sexuales con una trabajadora de su despacho en las instalaciones congresales.
Díaz, exlegislador de Alianza para el Progreso, no concurrió a la sesión -que estuvo presidida por Martha Moyano- para ejercer su derecho a la defensa.
Veinticinco parlamentarios de distintas agrupaciones políticas respaldaron el informe elaborado y sustentado por el legislador Luis Aragón (AP) y aprobaron también nombrar como integrantes de la comisión acusadora al mismo Aragón y a Lady Camones, presidenta de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales.
Ambos deberán sustentar ante el Pleno del Parlamento el informe y será instancia la que tome la decisión final sobre el parlamentario infractor.
NOTA ORIGINAL
La Comisión Permanente del Congreso votará hoy, martes tres de enero, por el informe final de la denuncia constitucional contra el legislador Freddy Díaz, que propone su inhabilitación tras ser acusado de violar a una trabajadora de su despacho congresal.
La Subcomisión de Acusaciones Constitucionales (SAC) del Parlamento ya había aprobado el informe final que sanciona con inhabilitar al congresista para el ejercicio de la función pública por 10 años.
¿Qué pasa si se aprueba el informe final?
Si el informe es aprobado por la Comisión Permanente, esta nombrará a una subcomisión acusadora integrada por uno o más miembros de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, con el objetivo de sustentar el informe y formular la acusación en su nombre ante el pleno del Congreso, de acuerdo con el artículo 89 del Reglamento del Congreso.
La dopó y ultrajó
Los hechos se registraron el 27 de julio pasado en la oficina del congresista, ubicada en el edificio congresal del jirón Azángaro.
Esa noche, el entonces legislador de Alianza para el Progreso –según el testimonio de la agraviada– la “presionó para brindar” por la elección de Camones como presidenta del Legislativo. Allí, además, la habría dopado, ultrajado e incluso secuestrado al impedirle salir del recinto.
Para justificar el execrable hecho, Díaz sostuvo posteriormente que mantuvo una “relación esporádica” con la denunciante, versión que fue tajantemente desmentida por ella.
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