Violentas protestas se produjeron la tarde de este domingo 22 de enero en la provincia de Yunguyo, en Puno, cerca de la frontera con Bolivia. Los manifestantes incendiaron locales estatales como rechazo a la intervención policial del último sábado que acabó con la detención de más de 190 personas que permanecían alojadas en la universidad de San Marcos, en Lima.
Cientos de personas llegaron hasta la zona de frontera y atacaron diversos establecimientos. Luego, prendieron fuego a las sedes de Migraciones, Aduanas Senasa, Policía Judicial y un puesto de vigilancia de la Policía Nacional.
Precisamente en esta zona se realiza el control de las personas que salen del Perú hacia Bolivia o viceversa.
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Además, diversos medios de comunicación de la zona reportan que los mercados y tiendas siguen cerrados. Algunas vías permanecen cerradas y Puno continúa paralizado.