Conoce más acerca del Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado

Perú es uno de los países más biodiversos del planeta. Por ello, el Estado peruano establece áreas naturales protegidas para que los peruanos y el mundo en general cuenten con un patrimonio natural bien conservado.

El Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) es la entidad encargada de desarrollar un conjunto de acciones para asegurar que estas áreas protegidas se mantengan en buenas condiciones, logrando que las muestras representativas de ecosistemas, especies y genes se conserven y, con ello, asegurar la provisión de servicios ecosistémicos que beneficia a las poblaciones locales.

En ese sentido, se creó el Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SINANPE).A continuación, te contamos 5 datos que le ayudarán a entender la importancia de este sistema:

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1. EL SINANPE MANTIENE MUESTRAS IMPORTANTES DE LA BIODIVERSIDAD DEL PERÚ

El SINANPE se ha creado tomando en cuenta nuestra gran diversidad biológica, siendo su conservación el principal objetivo. Actualmente mantiene muestras de las 21 ecorregiones existentes en el país, abarcando los desiertos de sechura y manglares en la región costera; las yungas, páramos y pastizales altoandinos en la sierra, y los bosques amazónicos y sabanas del Beni en la región Amazónica.

En las áreas que conforman el sistema se han identificado más de 2,800 especies de fauna y 10,000 de flora silvestre. La conservación de algunas de ellas depende del funcionamiento del SINANPE como un sistema integrado; por ello, es fundamental tener una gestión a este nivel.

Este es el caso de las especies con amplios requerimientos de espacios naturales como el otorongo (Panthera onca), el oso andino (Tremarctos ornatus) y el cóndor (Vultur gryphus), así como el de las especies migratorias como los grandes bagres amazónicos.

2. LAS ÁREAS QUE FORMAN PARTE DEL SINANPE PUEDEN CLASIFICARSE EN 9 CATEGORÍAS Y UN ESTATUS TRANSITORIO

El SINANPE está conformado por las 76 Áreas Naturales Protegidas de administración nacional que existen hasta la fecha en el Perú, cuya gestión busca, principalmente, la conservación de la biodiversidad y la contribución al desarrollo sostenible del país.

De las nueve (9) categorías, tres (3) tienen el estatus de protección más alto en el Perú. Esto permite únicamente actividades de educación ambiental, investigación científica, turismo y aprovechamiento de recursos dentro del área por parte de poblaciones con derechos de usos antes de la creación del ANP. Estas áreas corresponden a los parques nacionales, santuarios históricos y santuarios nacionales.

El resto de las áreas corresponden a categorías en las que, además de la conservación, se busca el beneficio directo de las poblaciones humanas a partir de la promoción y apoyo al aprovechamiento de recursos naturales de manera sostenible. Entre estas áreas destacan las reservas nacionales y comunales, cotos de caza, bosques de protección, reserva paisajística y refugio de vida silvestre.

Asimismo, en el Perú existen las zonas reservadas, espacios que han sido declarados como áreas naturales protegidas, pero que aún no tiene una categoría establecida debido a que requieren estudios complementarios que permitan determinar su categoría, además de un proceso participativo, con todos los actores involucrados, para su establecimiento.

3. EL SINANPE DEBE CONTAR CON UN DISEÑO FÍSICO ADECUADO PARA ALCANZAR LOS OBJETIVOS DE CONSERVACIÓN

Para lograr la conservación de la diversidad biológica del Perú, se debe asegurar que el SINANPE cuente con una serie de características físicas y funcionales, llamado componente físico, que sirvan de base para que, a partir de una buena gestión, se alcancen los objetivos establecidos. El buen diseño del componente físico del SINANPE contempla la composición, estructura y función asociadas a cuatro características básicas:

• La representatividad, dada por la cantidad de elementos de nuestro país, principalmente ecológicos, incluidos dentro del sistema para su conservación.
• El grado de fragmentación, es decir cuán divididos están, en número y tamaño, las áreas y los elementos ecológicos que las conforman.
• La vulnerabilidad de estos espacios ante perturbaciones que ocurren fuera de las áreas que conforman el sistema (efecto borde).
• La conectividad que existen entre las áreas y los elementos ecológicos que las conforman.

4. EL MONITOREO COMO PARTE FUNDAMENTAL PARA LA BUENA GESTIÓN DEL SINANPE

Evaluar cada cierto tiempo cómo van los resultados e impactos que queremos lograr con la gestión del sistema es importante para tomar decisiones adecuadas y en el momento oportuno.Por ello, el SERNANP, en conjunto con WCS y otros aliados, ha implementado un protocolo para el monitoreo del componente físico del SINANPE y desarrollado la línea base al 2020.

Esta evaluación toma en cuenta las cuatro características básicas que deben considerarse para contar con un diseño físico adecuado: representatividad, grado de fragmentación, vulnerabilidad al efecto de borde y conectividad.

Los resultados de la evaluación han permitido saber si se están cumpliendo las metas trazadas a nivel nacional y con los diversos acuerdos de conservación internacionales. Además, esta información es un insumo clave para el establecimiento de nuevas políticas de conservación en el marco del proceso de actualización del Plan Director.

5. EL SINANPE BUSCA CUMPLIR CON METAS INTERNACIONALES PARA CONSERVAR EN BUEN ESTADO LA DIVERSIDAD BIOLÓGICA DEL PLANETA

En el 2010, en Japón, como parte de la décima reunión de la Conferencia de las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biológica, se aprobó el Plan Estratégico para la Diversidad Biológica, fijándose las 20 Metas Aichi.

Una de ellas se refiere específicamente a las áreas naturales protegidas (meta 11), bajo el objetivo estratégico de mejorar la situación de la diversidad biológica salvaguardando los ecosistemas, las especies y la diversidad genética.

Perú es uno de los 196 países que conforman este compromiso internacional, siendo el Ministerio del Ambiente, a través de sus órganos adscritos como el Sernanp, quien se asegure del cumplimiento de esta meta, velando por el buen estado y funcionamiento del SINANPE.

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