Pequeñas diferencias

Ayer, en distintas ciudades de Brasil, marcharon cerca de un millón de personas contra el gobierno de Dilma Rousseff y las relaciones de su partido con la corrupción destapada en el caso Petrobras. Solo en Sao Paulo desfilaron más de medio millón, hartos y asqueados del multimillonario saqueo de la principal empresa estatal por parte del Partido de los Trabajadores (PT) y las constructoras a nombre del "desarrollo" popular. Y es que, al revisar la información del caso, uno no puede sino quedarse absorto: más de US$3,700 millones en coimas de acuerdo a la revista The Economist desde el 2004.

Por supuesto, el gobierno ha salido a negar cualquier conocimiento sobre el tema. Ello, sin importar que doña Dilma, durante buena parte de dicho periodo, fue ministra de Energía y presidenta del Consejo de Administración de la empresa petrolera. Así, como leen.

El fiscal general Rodrigo Janot anunció la investigación de 54 personas, pero desestimó investigar a la mandataria carioca; la razón es muy simple: según las leyes brasileñas, solo se puede investigar a la mandataria por casos ocurridos durante su gestión. Pero ello no la libra, en principio, de seguir la misma senda cuando acabe el reinado. Y aunque muchos señalen a Janot por mantener a doña Dilma fuera del escándalo, dejó una frase para la historia: "No tengo el don de predecir el futuro, pero tengo suficiente experiencia para entender cómo la parte disfuncional del sistema político se comporta cuando se enfrenta a una acción vigorosa de la Fiscalía en la lucha contra la corrupción".

A diferencia del fiscal Janot, nuestra Fiscalía se ha hecho conocida por una filosofía exactamente opuesta: tiene el don de predecir y, cuando lo hace, siempre beneficia –por su experiencia, imaginamos– al sistema político cuando de investigar se trata. No por algo no ha caído ninguna cabeza después de las corruptelas de los 60, 70, 80 y de toda la era posfujimorista. Y ni qué decir de los US$6,000 millones que invertiremos los peruanos en un gasoducto que será construido (no se desmayen) por una de las empresas investigadas. ¿Saldremos algún día a la calle?

Juan José Garrido director@peru21.com