El viernes pasado Milei brindó un muy bien estructurado discurso durante la apertura de las Sesiones Ordinarias 2024 del Congreso argentino, uno de los mejores que le he escuchado. Un país grande con tantas riquezas naturales, con una industria bastante diversificada y con un buen manejo macroeconómico, no tiene por qué perder su moneda subordinándola al dólar americano.

Ayer fue más objetivo e inteligente: resumió lo mal que encontró al país, enumeró las reformas que se requieren, incluyendo un paquete de leyes que llamó “anticasta” que busca atacar la corrupción en el sector público, eliminar gollerías de políticos y funcionarios públicos, introducir una serie de medidas de austeridad y prohibir que el banco central financie al gobierno con emisión monetaria, entre otras reformas; y finalmente propuso el llamado Pacto de Mayo, basado en diez principios de libertad económica que son bastante sensatos.

Estos principios fueron los siguientes: inviolabilidad de la propiedad privada, equilibrio fiscal, reducción del gasto público en torno al 25% del PBI, una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva y promueva el comercio exterior, discusión de la coparticipación federal de impuestos, compromiso de fomentar la explotación de los recursos naturales, reforma laboral que promueva el trabajo formal, reforma previsional con libertad de elección entre sistema público o privado y sustentable, reforma política integral, y la apertura comercial. Es positivo que la dolarización ya no sea prioritaria en su programa.

Los diez principios de Milei son similares a los que fueron la base del buen desempeño de nuestra economía en la primera década del siglo. Lamentablemente, a partir del gobierno de Humala empezamos a torpedear varios de ellos, lo que ocasionó que se desacelerara nuestro crecimiento y capacidad de generar empleo formal. En particular, hemos retrocedido en cuanto a políticas laborales y en promover la explotación formal de los recursos naturales.

Lo más relevante del discurso fue la convocatoria al Pacto de Mayo, un gran acuerdo nacional, donde invitó a gobernadores, expresidentes y líderes de los principales partidos políticos, para reunirse en Córdoba el próximo 25 de mayo, fecha coincidente con la conmemoración del Día de la Patria, para la firma de un nuevo contrato social que establezca estos 10 principios del nuevo orden económico argentino. Este llamado a la unidad fue bien recibido por la población, cuyo apoyo será importante para presionar a los políticos, particularmente a los de oposición, a sumarse y a aprobar las consiguientes necesarias reformas. Mucho camino que recorrer todavía, pero van en la dirección correcta.