[Opinión] Carlos Bruce: “Y ahora la China”

El tema económico empieza a agobiar a las familias. Los precios de los productos agrícolas suben por la inoperancia del Gobierno para comprar fertilizantes. Tenemos la gasolina más cara de la región incrementando los costos de transporte que impactan en el nivel general de precios. Las tasas de interés se incrementan por el accionar de la Reserva Federal americana y del BCR del Perú, en un esfuerzo para evitar un brote inflacionario.

A todos estos problemas se suman los sombríos pronósticos de la economía de China, que es nuestro principal socio comercial. La actividad económica del gigante asiático se vio seriamente afectada por los estrictos y prolongados confinamientos que tuvo ese país para contener el COVID. No se descarta rebrotes que lleven a volver a implementar estos encierros, lo que hace que los pronósticos de crecimiento de su economía sean muy conservadores.

El Banco Mundial ha reducido en 0.8% la proyección de crecimiento de la economía China y estima que su PBI solo crecerá 4.3%. La OCDE pronostica que el crecimiento será de 4.4%. Estas tasas tan modestas de un país que contribuye con el 30% de la economía mundial significan un impacto negativo mundial importante.

Para el Perú son muy malas noticias porque va a impactar de manera negativa en el precio del cobre, que es uno de nuestros principales productos de exportación, además de los otros productos mineros y agropecuarios que le vendemos a ese país.

Pero el mayor problema es que este impacto externo negativo nos llega cuando está al mando un Gobierno poco profesional y bastante inoperativo que va a incrementar los efectos adversos que sentiremos todos en nuestros bolsillos y en nuestra calidad de vida.