Juan José Garrido: Jales y jalados

Parte importante de toda estrategia electoral –y sobre todo de segunda vuelta– son las coaliciones: aportan peso político, voceros, fondos, votos, ideas; en fin, pueden servir de mucho si están debidamente alineadas con la estrategia. Esto último es clave: jalarse a una personalidad que no encaja con la estrategia planteada puede ser negativo en el balance, así como un jale puede apuntalar en determinado perfil o carencia.

Por ejemplo, la segunda vuelta del 2011. Lo que estaba en juego, en ambos finalistas, era quién representaba el "mal menor": ambas candidaturas suponían riesgos democráticos, y uno –Ollanta Humala–, un giro brusco en el modelo de crecimiento. Mientras el fujimorismo se mantuvo cerrado, básicamente, a sus aliados naturales, el nacionalismo –de la mano de Favre– apostó por un gran despliegue de personalidades y apoyo mediático: desde Mario Vargas Llosa hasta el último intelectual y artista, pasando por universidades y medios. El resultado fue que muchos vieron, a partir de ello, a un candidato menos dogmático, dispuesto a moderarse, a tranzar, a prometer mesura y, con ello, se ganó el mote de "mal menor".

En esta segunda vuelta estamos viendo un festival de jales, y si bien muchos son positivos, otros levantan más de una ceja. Y, de nuevo, no siempre siguen a la estrategia.

¿Cuáles son las estrategias? Al fujimorismo le convenía una polarización ricos-pobres, mientras a los ppkausas una polarización ética. En dicha línea, al fujimorismo le convenían aquellos jales que mejoren su postura en la polarización ética, como a PPK reducir la imagen de "candidato de los ricos". Los jales de Hernando de Soto y Elmer Cuba abonan en la estrategia fujimorista: gente proba con perfil tecnocrático; en el lado ppkausa, el de Avelino Guillén suma a la imagen ética, mientras el de César Acuña la neutraliza.

Quién supo articular la mejor coalición se sabrá el 6 de junio; hasta entonces, no duden de que la estrategia de los jales continuará. La diferencia es si serán jales o jalados.