Bomba detox
Bomba detox

Jean Paul Osores

josores@gmail.com

Muchos, después de algunos días o semanas de llevar un ritmo de alimentación poco saludable, poco hidratados, se sienten pesados, sin ganas de levantarse de la cama, con sueño durante el día. Hay presencia de gases, molestia y ardor abdominal, cólicos y otros síntomas que están relacionados a un desequilibrio momentáneo o pasajero secundario a la alta ingesta de azúcar en postres o dulces, grasas trans presentes en frituras, arroces copiosos, quesos y embutidos que además tienen mucha cantidad de sodio y preservantes. A veces, el alto consumo de bebidas alcohólicas inyecta dosis extras de calorías provenientes del alcohol, además, por lo general, vienen acompañadas de endulzantes y hasta bebidas energéticas. Luego de varios días o semanas, son muchos los que presentan estas manifestaciones clínicas. Llega un día en que notamos que venimos tomando antiácidos, analgésicos y otros medicamentos, muchas veces prescritos por uno mismo, y es ahí cuando nos damos cuenta de que debemos ordenarnos con nuestros hábitos de alimentación y posponer muchos eventos, reuniones o situaciones en donde sea complicado dejar de comer o tomar todo lo que nos haga daño o caiga pesado. Para empezar, durante tres días debemos hidratarnos solamente con agua, no menos de 2 a 3 litros, las frutas deben estar presentes hasta mediodía, en un desayuno con frutas picadas y dos unidades más de ellas a las 11 de la mañana. Para la hora del almuerzo, las cremas de verduras van muy bien, zanahoria, zapallo, brócoli y espinaca son algunas alternativas, además de proteína como el pescado o pavo con ensalada y aceite de oliva. Ya para media tarde, las infusiones sin azúcar nos ayudarán a mejorar el tránsito intestinal, y en la noche se puede repetir el almuerzo, pero en media ración para dormir ligeros. Las frutas y verduras con alta concentración de vitamina C y antioxidantes son geniales para favorecer la diuresis. Además, la fibra que nos proporcionan limpiará de manera eficiente el colon y así acelerará también nuestro metabolismo. Por último, como siempre, algo de actividad física ¡es la voz!