El tribunal ordenó a los dos países "abstenerse de cualquier acción que pueda agravar o extender la disputa (...) o la haga más difícil de resolver". (Foto: EFE)
El tribunal ordenó a los dos países "abstenerse de cualquier acción que pueda agravar o extender la disputa (...) o la haga más difícil de resolver". (Foto: EFE)

En el Perú sin instituciones y de la mezquindad orquestada, el mejor ejemplo de política de Estado en las últimas décadas alcanzó su clímax cinco años atrás, cuando se conoció el fallo de la Corte Internacional de Justicia con el que recuperamos 50 mil km2 de mar sobre los que Chile ejercía dominio sin derecho.

De entre todos los factores que influyeron en ese proceso de paz existe un consenso de que fue esencial haber mantenido el equipo nuclear y la estrategia inicial, a pesar de que en el medio tuvimos cambio de gobierno. Durante la presidencia de García se presentó la demanda escrita, mientras que durante la presidencia de Humala se concluyó la fase oral, lo que implicó defender ante la CIJ los argumentos que ya habían sido presentados años atrás.

Los funcionarios encargados de ese proceso son lo más parecido que hemos tenido en la era de los héroes de barro a la figura del héroe republicano, con el agregado de que las armas que usaron fueron la ley, las ideas y los argumentos, además de que, esta vez, la victoria sí nos sonrío. Allan Wagner, como agente ante La Haya; José Antonio García Belaunde, como coagente; Gustavo Meza Cuadra, a cargo del equipo de Lima; Marisol Agüero, como ministra concejera; Juan José Ruda, como asesor jurídico de Cancillería, y varios otros profesionales imprescindibles fueron responsables de un momento único de cohesión, solo comparable con la reciente clasificación mundialista.

Cinco años después, no hemos sido capaces de brindar ese nivel de continuidad a ninguna decisión de Estado, lo que evidencia que en el Perú prevalece un archipiélago de intereses personalistas que impide trazar esa línea de acción en otros asuntos que impacten en la vida diaria de la gente, como salud, educación y acceso a la justicia. Que La Haya sirva como
ejemplo.

TAGS RELACIONADOS