Carlos Basombrío: Dos cartas, dos reflexiones

UNOEstimado Sr. Basombrío:Sería muy estimulante si alguna vez en alguna de las columnas que escribe sobre abusos a periodistas, como la de ayer, también se acordase de mí, que el PJ del señor San Martín me condenó con un caso prescrito y encima dándole la razón al Sr. Ramírez Erazo. Aun para los estándares de nuestro PJ, esto fue un récord de abuso. Y el CNM del Sr. Talavera, allegado a San Martín, desestimó el caso mientras un amparo sobre este languidece desde hace más de dos años en el PJ. Sé que no soy santo de su devoción, pero abusos son abusos. Hasta los que se cometen con Aldo Mariátegui, mire Ud. Saludos,Aldo Mariátegui

Estimado Sr. Mariátegui:Disculpe por no mencionarlo. Todos los periodistas merecen el mismo trato y ser defendidos de los abusos del poder.Atentamente,Carlos Basombrío

Reflexión: No importa que usted sea o no santo de mi devoción. De hecho, tengo muy pocas devociones. Creo que todos los periodistas, independientemente de sus ideas, deben ser defendidos ante cualquier abuso del poder. Suscribo así el pronunciamiento del IPYS (del que soy miembro), que en el 2013 denunció que en su caso hubo "una objetiva falta de transparencia en dicho procedimiento judicial" y que exigió al Poder Judicial implementar mecanismos de transparencia y seguridad jurídica en el procedimiento de sus decisiones". La razón para resaltar en la columna los casos de Rafo León y Fernando Valencia es que son muy recientes.

DOS Estimado Sr. Basombrío: El jueves pasado, Aldo Mariátegui, en su columna de opinión, señala que tuve un "alto cargo" en el gobierno de Fujimori. Eso es falso. No tuve ningún cargo, ni alto ni bajo, entre los años 1990 y 2000 en ese gobierno. Durante esos años trabajé en el BCR y en la PUCP. Simultáneamente presté servicios de consultoría en varios proyectos con financiamiento de instituciones multilaterales como el BM y el BID. Fui asesor de Javier Diez Canseco, director de Actualidad Económica, una revista de oposición al régimen, y miembro de Aprodeh. Considero que sus lectores tienen derecho a conocer la verdad y a saber quiénes incluyen mentiras en sus columnas de opinión.Atentamente,Pedro Francke

Estimado Sr. Francke:Mis atribuciones como defensor del lector no incluyen pedir rectificaciones a los columnistas, dado que ellos firman y son exclusivamente responsables por ellas.Atentamente,Carlos Basombrío

Reflexión: He recibido cientos de comunicaciones cuestionando contenidos y estilo de algunos columnistas de Perú21. En este, como en los otros casos, eventuales rectificaciones dependen del columnista y, en última instancia, del director. Como reflexión general, creo que todos los que escribimos en Perú21 debemos tener estricta observancia a sus principios rectores; entre ellos, el de la veracidad ("la búsqueda de la veracidad y el mantenimiento de la credibilidad son exigencias supremas de los medios del grupo").