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Las Bambas y la lección nunca aprendida

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Las Bambas: Salvador del Solar se reúne con Gregorio Rojas para iniciar el diálogo. (PCM)
Fecha Actualización
Al mismo tiempo que se escribía esta columna se intentaba retomar el diálogo entre la PCM y la comunidad de Fuerabamba. Uno más de una larguísima lista de conflictos sociales en la historia de nuestro país. La pregunta es si la actual crisis será la oportunidad para empezar a diseñar una política de largo aliento que permita evitar que las protestas alcancen los niveles de esta como sucede con frecuencia.
El Perú es un país minero por excelencia. Para ser más precisos, nuestra economía se sostiene en la extracción de materias primas. Eso lo sabemos, como también que subsiste una situación de desigualdad a lo largo y ancho de nuestro territorio, fruto en buena cuenta del desorden legal, la falta de planificación, el escaso conocimiento de nuestra diversidad cultural y la ausencia del Estado.
Una mina tiene normalmente una vida larga. A lo largo de la misma su entorno cambiará porque no permanecerán siempre las mismas autoridades locales y nacionales, ni permanecerán inmóviles las condiciones que determinan las necesidades o preocupaciones de los habitantes de su entorno.
En el caso particular de Las Bambas queda claro que las fragilidades del sistema han sido aprovechadas por los ahora famosos hermanos Chávez Sotelo, “asesores legales” de la presidencia de Fuerabamba y otras comunidades, cuya especialidad no ha sido otra que capitalizar el descontento para enriquecerse. Al margen de los porcentajes o los millones que estos “abogados” solicitaban para compensar el descontento social, queda claro que los mencionados son una consecuencia antes que una causa de la crisis (todavía no sabemos si podemos descartar, por ejemplo, que detrás de estos u otros personajes exista además un móvil político detrás de sus acciones).
La regionalización es un fracaso. ¿Acaso ha dejado el Perú de ser un país centralista? ¿O las administraciones locales y regionales han contribuido a mejorar las condiciones de vida en sus jurisdicciones? Salvo en casos aislados, la mayoría está asociada a escándalos de corrupción o pésima administración.
Que Fuerabamba nos deje lecciones aprendidas…
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