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Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Carolina Trivelli,Sumas y restasEconomista

Cosas buenas están pasando en el campo de la inclusión financiera. El Perú está dando decisivos pasos hacia un creciente acceso, y uso, de servicios financieros de calidad para amplios y variados segmentos de la población. En particular, se trata de lograr que las herramientas financieras lleguen a los estratos de menores recursos como parte del instrumental que requieren para salir adelante, para superar las condiciones de pobreza y exclusión que hoy enfrentan.

Desde el lado del sector privado, ASBANC acaba de anunciar que todas las entidades financieras harán un esfuerzo colectivo para implementar el dinero electrónico. Cooperar para competir y avanzar. Asimismo, un colectivo de más de 20 instituciones privadas entre gremios de entidades financieras, ONG, consultoras y empresas que vienen trabajando temas de inclusión financiera, y sobre todo de educación financiera, se reúnen para compartir sus aprendizajes, para identificar mejores prácticas, para evitar duplicar esfuerzos. Este colectivo espera poder colaborar con las iniciativas desde el sector público en esta materia y lograr una creciente colaboración entre el sector privado y el público para avanzar más rápido y con pie más firme en la tarea de lograr inclusión financiera.

Desde el lado del sector público, hace una semana se publicó la norma que crea la Comisión Multisectorial de Inclusión Financiera (Decreto Supremo 019-2014-EF), un paso importante para avanzar como país hacia una mayor inclusión financiera. Recordemos que a pesar de las buenas condiciones que tenemos hoy, tenemos bajos niveles de inclusión financiera (muy por debajo del promedio mundial y del de América Latina según los datos del FINDEX, Banco Mundial).

La recientemente creada Comisión, que tendrá carácter permanente, se encargará de preparar y aprobar la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), definirá sus lineamientos y acompañará su implementación. Son miembros de esta Comisión, el MEF, la SBS, el BCR, el MIDIS y el Banco de la Nación.

La ENIF nos dirá cual es el plan, las metas y los plazos en los cuales como país avanzaremos en inclusión financiera. Esta estrategia, con la colaboración de la recientemente creada Comisión y las iniciativas privadas, nos dirá qué hará cada quien en el sector público para lograr las metas de inclusión financiera y dará el marco para ordenar las intervenciones actuales en esta materia.

La ENIF conseguirá sus metas, por ambiciosas que sean, si logra promover acciones articuladas y complementarias entre sector público y privado. La Comisión tiene muchos insumos para avanzar, tiene socios que articular, escuchar y sumar. Estaremos atentos a su trabajo.

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