Un partido del campeonato regional del estado de Espíritu Santo, en Brasil, terminó mal luego de que el técnico Rafael Soriano agrediera con un cabezazo a la jueza de línea. El equipo de fútbol decidió culminar el contrato del agresivo sujeto.
El club deportivo informó que “ante lo ocurrido, el entrenador fue desvinculado del club”. Además, aseguraron que repudian toda “y cualquier tipo de violencia, sea física, verbal, moral o emocional, principalmente contra mujeres”.
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Asimismo, agregaron que se solidarizan con “la árbitra asistente Marcielly Netto y nos ponemos a disposición para lo que sea necesario”, según se lee en el comunicado que difundieron.
El hecho de violencia se dio durante el partido por cuartos de final del Campeonato Capixaba en la ciudad de Nova Venecia. En el encuentro, el Deportivo Ferroviaria fue eliminado tras caer por 3-1 ante el club Nova Venecia.
El árbitro decidió pitar el final del primer tiempo cuando el Deportivo Ferroviaria iba a cobrar un tiro de esquina, cuando Soriano invadió la cancha acompañado por varios de sus jugadores para exigirle explicaciones al juez. Luego de la discusión, el entrenador le dio un cabezazo en el rostro a la jueza y fue expulsado inmediatamente.
Soriano negó la agresión y aseguró que la jueza quiso aprovecharse de la situación por su condición de mujer.