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La conmovedora foto de un padre sosteniendo la mano de su hija muerta: “No pude salvar a mi princesa”
Mesut Hancer fue en busca de su hija de 15 años tras el terremoto en Turquía, pero no pudo salvarla.
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Mesut Hancer sostiene la mano de su hija Irmak, de 15 años, quien murió en el terremoto en Kahramanmaras, cerca del epicentro del terremoto, el día después de que un terremoto de magnitud 7,8 azotara el sureste del país, el 7 de febrero de 2023. (Foto: Ad
Fecha Actualización
El terremoto de magnitud 7,8 que azotó Turquía ha dejado postales de desolación y desesperanza en cada uno de los rincones afectados en el país. Pero sin duda una de las fotografías más tristes e impactantes que se han visto a través de las catástrofes del mundo de todos los tiempos es la del padre sosteniendo la mano de su hija muerta, enterrada entre escombros.
Se trata de Mesut Hancer que se aferra a la mano de su hija Irmak, de tan solo 15 años, sin vida entre dos losas de hormigón.
El diario alemán Bild asistió al funeral de Irmak y conversó con el padre, quien contó los detalles de su terrible pérdida.
“Estaba trabajando en el horno cuando el suelo tembló. Llamé a mi esposa y me dijo que mis hijos y mi hija menor estaban bien. Pero esa noche mi hija menor se quedó donde su abuela. Irmak y sus primos habían venido y querían estar con ellos”, contó el papá.
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Entonces, Mesut fue hasta la casa donde se quedó su hija, pero al llegar encontró el edificio colapsado.
“Oré mucho, pero desafortunadamente la perdimos. Traté de cavar con mis propias manos para salvar a mi princesa, pero al final no pude salvarla”, lamentó el padre.
La visión del fotógrafo
Adem Altan, fotógrafo de AFP, fue quien captó el íntimo momento entre padre e hija. La foto fue primera plana en varios diarios del mundo y se viralizó con rapidez en todas las redes sociales.
“Me emocioné mucho en ese momento. Tenía lágrimas. Me decía a mí mismo: ‘Dios mío, es un dolor insoportable’”, dijo el fotógrafo.
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Terremoto en Turquía (Photo by Adem ALTAN / AFP)
Adem le preguntó entonces su nombre y el de su hija.
“Mi hija, Irmak”, respondió Mesut Hancer.
“Hablaba con dificultad, en voz muy baja. Fue difícil hacerle más preguntas, ya que la gente de alrededor pedía a la gente que guardara silencio para poder oír las voces de los posibles supervivientes atrapados bajo los escombros”, relata el fotógrafo.
Los equipos de rescate siguen este viernes buscando supervivientes entre los escombros dejados por el masivo terremoto que golpeó el lunes Siria y Turquía, uno de los más mortíferos de la región, con casi 23.000 muertos.
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