La reina Letizia conoció la dura realidad de Haití, el país más pobre de América Latina. Junto a la primera dama de ese país, Martine Etienne, recorrió el colegio y hospital San Vicente de Paul, ubicado en Cité Soleil, una comuna de la periferia de Puerto Príncipe donde reina la miseria, suciedad y delincuencia.
La escuela dirigida por monjas españolas y que recibe apoyo económico de España, alberga a alrededor de un millar de niños entre 3 y 12 años. La esposa de Felipe VI y la primera dama de Haití llegaron a este lugar e hicieron un recorrido por las diferentes instalaciones tras observar la pobreza del asentamiento, donde no hay agua potable, ni luz, ni alcantarillado.
Este recinto también cuenta con un centro de salud, donde cerca de 250 madres y sus bebés pasan seguimiento en los meses posteriores al parto.
Doña Letizia se mostró cariñosa con los pequeños, a quienes acarició, besó y hasta cargó en sus brazos.
La Reina también se desplazó por el comedor y el patio del centro educativo. Allí, un grupo de alumnos le dedicó una canción en español y se acercó a ella para acariciarle el pelo y su barbilla.
Al finalizar, los pequeños entregaron una bandera de Haití, unas flores y una mantelería con unas palmeras bordadas a Letizia.
La visita se prolongó por más de una hora y media en dicho recinto, construido hace 40 años en un antiguo basurero y que ahora es administrado por siete religiosas.