/getHTML/media/1229195
Cherman: "Quien me quiebra el lado patriótico fue Juan Acevedo con Paco Yunque"
/getHTML/media/1229190
Marco Poma CEO de Tkambio: "Perú está atrasado en materia de 'open banking'"
/getHTML/media/1229170
Percy Medina por nueva Mesa Directiva: "Tenemos que estar vigilantes"
/getHTML/media/1229169
Carlos Basombrío: "La lista que salga será más de lo mismo"
/getHTML/media/1228869
Iván Arenas: "Hay riesgos si APP asume Mesa Directiva"
PUBLICIDAD

Nelson Mandela es un luchador pese a la cercanía de su muerte

Hija mayor del expresidente de Sudáfrica informó que este permanece “muy fuerte” y que les está enseñando una lección.

Imagen
Nelson Mandela recibe tratamiento en su domicilio de Johannesburgo. (AFP)
Fecha Actualización
Makaziwe Mandela, la hija mayor de Nelson Mandela, dijo hoy que el expresidente de Sudáfrica permanece "muy fuerte" y "valiente" incluso en su "lecho de muerte".

"Tata todavía está con nosotros. Muy fuerte, muy valiente incluso, a falta de una palabra mejor, en su lecho de muerte. Creo que todavía nos está enseñando lecciones. Lecciones de paciencia, de amor, de tolerancia", señaló Makaziwe en una entrevista concedida a la cadena de televisión pública SABC.

Destacó, asimismo, que "cada momento, cada minuto con Tata me sorprende… Hay veces que tengo que pellizcarme para creer que vengo de este hombre que es tan fuerte, que es un luchador".

A sus 95 años, Nelson Mandela recibe tratamiento en su domicilio de Johannesburgo, convertido en una unidad de cuidados intensivos desde que fuera trasladado del hospital de Pretoria donde estaba hospitalizado, el pasado 1 de setiembre.

Madiba —como se le conoce en Sudáfrica— fue ingresado en estado grave el 8 de junio por una recaída de una infección pulmonar, y su estado pasó a ser crítico el 23 de junio.

Pese a las mejoras comunicadas por la familia y la Presidencia desde entonces, el pronóstico del mandatario no ha mejorado hasta el momento.

Mandela se convirtió en 1994 en el primer presidente negro de la historia de Sudáfrica y lideró, junto a su antecesor en el cargo y último líder del apartheid, Frederik De Klerk, una transición democrática que evitó una guerra civil entre blancos y negros en el país austral.