Guillermo de Cambridge y el trago que más solía pedir durante sus días de fiesta

Si bien ahora es poco probable que se vea al duque de Cambridge en un club nocturno, hay muchas historias sobre lo que hizo mientras disfrutaba de su tiempo allí. Sin duda, está claro que el príncipe Guillermo sabía cómo divertirse y disfrutó de la oportunidad de ser solo una cara más en la multitud.

Al igual que el duque de Cambridge, muchos royals son uno más cuando se trata de tomar una copa para celebrar ocasiones importantes, o cuando se trata de relajarse después de un día estresante. Ya sea que su bebida preferida sea un refrescante gin-tonic, un cóctel tropical o una sencilla cerveza, la realeza británica es bien conocida por disfrutar de una bebida alcohólica de vez en cuando.

Uno esperaría que los lugares frecuentados por un royal fueran los clubes más exclusivos y caros del Reino Unido, pero eso no podría estar más lejos de la verdad para el príncipe Guillermo. Si bien disfrutó de veladas ocasionales en establecimientos caros como el ahora desaparecido Boujis en Londres, no era raro ver a un joven duque de Cambridge en lugares como Elements o Walkabout.

En 2007, la adolescente Lisa Agar le contó al Daily Echo cómo se topó con el futuro rey en un club de Bournemouth y terminó bailando con él en la pista de baile. “Fue bastante gracioso porque conozco a los guardias de seguridad del club y dijeron que el príncipe Guillermo está aquí y yo dije oh sí, gracioso, ja, ja. Les decía a todos que se llamaba Danny y que a menudo lo confunden con Guillermo”, contó.

Si bien se dice que el príncipe Guillermo ahora disfruta de una simple cerveza y fue fotografiado haciéndolo en el Prince Albert Pub en Battersea mientras miraba las eliminatorias de la Eurocopa 2020, durante sus años en la Universidad de St Andrews en Escocia, definitivamente tuvo un lado más salvaje.

Se dice que disfrutó de tragos de sambuca y un cóctel llamado ‘Treasure Chest’, que es una combinación de licor de melocotón, brandy y champán y se sirve en un cofre de madera por 135 libras esterlinas (unos 170 dólares americanos) cada uno. Pero el príncipe Guillermo ciertamente no es el único miembro de la realeza que disfruta de una bebida ocasional. A su esposa, Catalina de Cambridge, se le ha visto disfrutando de una cerveza Guinness. Se dice que también disfruta de los gin-tonic.