Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

Un fue ejecutado por la Policía de Magdalena () cuando ya se encontraba neutralizado, luego de que robara una gaseosa y amenazara a dos oficiales con un cuchillo. La muerte de Saúl Fernández Pinzón (18) a manos de las fuerzas del orden han generado consternación y los oficiales están desaparecidos.

El hecho ocurrió a las afueras de un billar, según contó Susana Pinzón, madre de la víctima, quien también relató:  "Mi hijo pidió una gaseosa en una tienda, se la tomó y se fue sin pagarla. La propietaria del comercio, entonces, llamó a la policía. Pocos minutos después, llegaron dos uniformados y Saúl se escondió. Lo encontraron y lo sacaron del cuelo".

En el video, se muestra que el fallecido sacó un cuchillo, consecuentemente la escena se volvió más peligrosa. Uno de los patrulleros tomó del pantalón a Saúl, mientras el otro sacó un arma reglamentaria. Decenas de curiosos veían el hecho pero no hacían nada por detenerlo.

Retenido por algunos familiares, la víctima se aleja de los oficiales y uno de ellos saca un arma de fuego. El joven se lanza contra el policía y recibe un disparo en el pecho. Debido al impacto, Saúl Fernández trata de patear y recibe un segundo impacto. Al final y ya rendido en el piso, el policía lo ejecuta con dos balazos y la familia intenta que el oficial se aleje. 

Según las fuentes policiales colombianas, estos procedimientos se presentan al no tener un ambiente tranquilo y con mucho peligro. "Se presenta esta situación especial donde hay unas agresiones de la persona contra el uniformado y genera que accione el arma de fuego, frente a las heridas que recibió", comentó el coronel Gustavo Berdugo. 

TAGS RELACIONADOS